Desde 2005 hasta 2015, el recibo de la luz de un hogar medio español subió el 80%, lo que supone un 8% anual, pero si ampliamos el plazo hasta 2018, el incremento fue del 86%. El año 2020 lo comenzamos un aumento del 5% en el precio, pero el hecho de que en marzo nos confinaran por la pandemia del covid-19 provocó un aumento del consumo, lo que significa que también por esa vía nuestra factura engordó, a lo que hemos de añadir los vaivenes del precio general vinculado a elementos tales como la falta de lluvias que se produjo en mayo y cuya consecuencia fue una menor aportación a la producción eléctrica de energía eólica e hidráulica, unido a la subida del petróleo, y así hubo otro aumento de precio de 3,18%. En junio del 4,3%, en julio otro 4,6%...
Cuando nos llega el recibo nos alarmamos ante lo que hemos de pagar porque siempre nos parece mucho, pero cuando como hemos hecho, detallamos los porcentajes de esas subidas incluso mensualmente, la sorpresa es aún mayor y siempre acabamos preguntándonos cómo pagar menos.
La mejor manera de pagar menos es reducir el consumo. Así de simple: apagar las luces innecesarias, renovar a led si aún no lo hemos hecho, cerrar las habitaciones si ponemos calefacción o aire acondicionado para evitar fugas, y no poner ninguna de las dos cosas más tiempo del preciso ni a temperaturas extremas; si trabajamos en casa debemos buscar las zonas luminosas, y también debemos comprar aparados eficientes, que son más caros, pero tienen un menor consumo eléctrico que compensa siempre.
Para lograr esa eficacia deberíamos estar pendientes todo el tiempo de las estadísticas de nuestro consumo, y eso, la verdad es imposible, por eso la solución que da EnergyGo (compañía de energía Yoigo) resulta muy interesante porque tiene una aplicación disponible para Apple y Android, y está vinculada a un servicio eléctrico del mismo nombre, detrás del que está la compañía de telefonía Yoigo.
Probablemente esto sea algo que hagan todas las compañías eléctricas en el futuro, pero ahora mismo es con ellos con quienes, desde tu móvil, puedes hacer un seguimiento de tus consumos de forma detallada, pero lo mejor es que de forma proactiva te recomienda en cada momento cual es la tarifa que mejor se adapta a tus costumbres. Por ahora tienen tres tarifas, la de “Mismo precio todo el día”, la de “Discriminación horaria” y la de “Coche eléctrico”.
Cambiar de compañía eléctrica es siempre una opción posible si queremos ahorrar, pero hay que tener en cuenta no solo la tarifa, sino también si ésta es para siempre o se trata de una oferta inicial por un mes o varios o un año, también si penalizan darse de baja. En el caso que comentamos, el cambio de empresa se produce sin transición –no te cortan la luz para luego reengancharla-, no hay penalización si decides marcharte.
Otro dato a tener en cuenta es que aunque hoy día todo es on line, también importa tener un lugar físico –como las tiendas de Yoigo- donde acudir a informarse sin compromiso o contratar personalmente.