En la Comisión de Educación del Parlamento de Andalucía, el diputado de Vox por Almería, Juan Antonio Bosquet, lanzó una dura crítica a la consejera de Educación y también almeriense, María del Carmen Castillo, por el protocolo firmado con la Fundación Alejandro Rojas Marcos para impulsar el "habla andaluza" en las aulas. Lo hizo, irónicamente, empleando giros y acentos propios del habla andaluza que cuestiona, lo que añadió un tono de contradicción a su intervención.
Bosquet arrancó su pregunta denunciando que el Gobierno andaluz promueve un "andalucismo torpe con el que prácticamente nadie se identifica". Sin tapujos, vinculó esta iniciativa a lo que llamó "la Andalucía ficticia de Blas Infante" — declarado por el Parlamento Padre de la Patria Andaluza—, tachando su legado de "pantomima" útil solo para "mantener el cuento de la autonomía y aumentar el gasto público".
"Esos no son recursos para nuestra educación, señora consejera. Son artimañas para tapar los problemas reales que sufren los andaluces", afirmó, levantando murmullos en el hemiciclo. El presidente de la cámara tuvo que pedir silencio tras un intercambio de reproches entre bancadas.
El parlamentario de Vox centró su discurso en los problemas estructurales del sistema educativo andaluz, que, según él, el Gobierno de Juanma Moreno (PP) ignora al priorizar el habla regional. Con datos en mano, enumeró: "Han cerrado más de 2.600 aulas desde que entraron en San Telmo. El abandono escolar está por encima de la media nacional, nuestros alumnos son los que más suspenden en matemáticas, y en vez de quitar barracones, los ponen, como en el colegio Emilio Zurano Muñoz de Pulpí".
Bosquet cuestionó, hablando en andaluz y con sarcasmo la coherencia de la Junta: "¿Qué razón justifica impulsar el habla andaluza mientras los alumnos llevan mantas a clase por el frío o dan lecciones en barracones? Esto es un despropósito. La familia andaluza no necesita que este Gobierno se envuelva en una bandera inventada".
Respuesta de la consejera Castillo
La consejera de Educación, María del Carmen Castillo, respondió con contundencia al diputado de Vox, defendiendo tanto las políticas educativas de la Junta como el orgullo identitario andaluz. Con un tono entre irónico y pedagógico, Castillo desgranó un listado de actuaciones concretas y recalcó que trabajar por el habla andaluza "no es incompatible" con abordar los retos estructurales.
Castillo comenzó su réplica cuestionando la "dinámica" de Bosquet: "Usted me pregunta por el grupo de trabajo para impulsar el habla andaluza, y yo, con mi banderita de Andalucía, pensaba que como parlamentario andaluz estaría de acuerdo"*. Con ironía, subrayó la riqueza dialectal de la región: "Tenemos un habla preciosa. La Andalucía oriental tiene un acento, la occidental otro. ¿Por qué no vamos a poner en valor esa riqueza?".
La consejera, natural de Almería, vinculó esta iniciativa al orgullo identitario: "Celebramos el Día de Andalucía, la Bandera, pero también el Día de la Constitución o la Hispanidad. Somos andaluces, españoles, europeos y ‘del mundo mundial’, como dice nuestro himno". Y remachó:"No es incompatible trabajar por nuestra cultura y resolver problemas".
Inversiones y datos: 9.167 millones para educación y 2.500 actuaciones en infraestructuras
Frente a las acusaciones de desatención, Castillo enumeró logros y medidas concretas:
- Presupuesto educativo: "Hemos dedicado 9.167 millones de euros a educación".
- Infraestructuras: "2.500 actuaciones desde 2018, incluyendo la eliminación progresiva de barracones".
- Abandono escolar: "Lo hemos reducido en 6,5 puntos desde 2018. No es suficiente, pero avanzamos".
- Titulación juvenil: "La tasa de jóvenes de 20 a 24 años con estudios postobligatorios ha subido más de 10 puntos".
- Escolarización temprana: "Llegaremos al 60% en 0-3 años, 25 puntos por encima del objetivo europeo".
Además, destacó medidas de apoyo social y académico:
- Ayudas a familias: "886 millones en becas, libros de texto gratuitos y comedores subvencionados".
- Refuerzo de materias clave: "Las mayores cargas horarias de España en lengua, matemáticas e inglés".
- Bachillerato internacional: "Red pública con 22 centros".
- Climatización: "Hemos abordado por primera vez el problema del calor en las aulas".
Castillo cerró su intervención con un mensaje de autocrítica constructiva, pero también de firmeza: "Sé que no es suficiente, pero lo que no podemos decir es que no tengamos un sistema educativo potente. Un sistema del que, como andaluces, deberíamos sentirnos orgullosos".
La consejera mezcló datos duros con apelaciones emocionales, recordando que la defensa del habla andaluza no busca "inventar banderas", sino reivindicar una identidad que, para ella, es compatible con la excelencia educativa. Su réplica dejó en evidencia la polarización entre las visiones de Vox y el Gobierno andaluz: mientras unos ven "pantomima", otros claman por un orgullo que, aseguran, no resta recursos, sino que suma historia.