Cuando queremos contratar fibra óptica buscamos la mejor oferta internet en casa y lo cierto es que el mercado es una especie de selva en la que es muy complicado aclararse, pues hay decenas de tarifas distintas con servicios que a veces no sabemos ni para qué sirven.
Por eso, cuando contratamos internet es importante dedicar un tiempo a pensar en cuáles son nuestras necesidades para tener el mejor servicio al menor precio.
¿Necesitamos velocidades de 600 Mb en el entorno doméstico?
Podemos decir que la velocidad estándar ahora mismo es la de 600 Mb. Todas las operadoras ofrecen velocidades menores y hay alguna que llega incluso a ofertar un giga.
A más velocidad de la fibra mayor precio, por lo que podemos ajustar el gasto contratando una velocidad más baja, pues en realidad no hay hogar que necesite 600 Mb.
Con una oferta de 200 Mb vamos a tener más que suficiente para navegar, ver contenido en HD y 4K en streaming, jugar en línea, conectar móviles, etc., todo a la vez.
De este modo, no hay que dejarse cegar por la velocidad y contratar siempre la mínima que nos sirva, que para un hogar normal pueden ser 200 Mb.
¿Las tarifas móviles son competitivas?
Todas las operadoras que ofrecen tarifas de fibra óptica también tienen ofertas en las que incluyen líneas móviles. De hecho, hacen lo posible para que contratar ambas nos resulte beneficioso.
No en todos los casos es así, pues hay operadoras de internet con tarifas móviles muy competitivas y otras que están fuera del mercado. Además, en ocasiones ofrecen una cantidad de minutos y gigas que no necesitamos a cambio de un precio un poco más alto.
A nosotros nos toca ver si nos interesa vincular fibra y móvil, algo que dependerá del precio final.
¿Nos ofrecen un buen router?
Hasta hace unos años, la calidad del router no nos importaba demasiado más allá de que nos proporcionase una buena cobertura Wifi dentro de casa.
Ahora, este dispositivo es cada vez más importante y es imprescindible que la operadora nos ofrezca uno de marca reconocida y de calidad.
En casa tenemos uno o varios PC, portátiles, tablets, libros electrónicos, móviles, altavoces inteligentes, bombillas que controlamos con el móvil, etc. Eso hace que los dispositivos que conectamos al router se disparen.
Un router de mala calidad empezará a dar problemas cuando pasamos de los 16 dispositivos conectados a la vez, algo que cada vez es más común y entonces tenemos que buscar soluciones que pasan por comprar otro router o uno de esos dispositivos para crear una red en malla.
Para evitar incurrir en más gastos de los necesarios, lo mejor es preguntar a la operadora por el router que nos van a ofrecer y buscar información en Internet, en donde otros usuarios nos hablarán de cómo funciona en un uso real.
¿Quién paga la instalación?
Una instalación de fibra óptica no es compleja, pero un técnico especializado se tiene que desplazar a casa y pasar alrededor de una hora poniendo cable, la roseta y dejando la conexión funcionando con la velocidad que hemos contratado.
Eso tiene un coste y tenemos que saber quién lo paga. Lo normal es que seamos nosotros los que lo pagamos firmando permanencia y también dan la opción a no tener permanencia y hacernos cargo del coste del técnico.
Tendremos que ver qué es lo que nos interesa en función de nuestras circunstancias personales y así elegir la mejor compañía para nuestra casa.