De Garrucha, a más de 100 euros el kilo, y con secretos

Con la llegada de la Navidad, la gamba roja se erige como uno de los productos más codiciados en las mesas almerienses. Su sabor exquisito y su característico color rojo intenso la convierten en una delicia culinaria sin par. Sin embargo, detrás de cada langostino se esconde un secreto que pocos conocen, y es en Garrucha donde encuentra su origen la joya de la gastronomía marina.

En el Mercado Central de Almería, ayer viernes se vivió un ajetreo especial alrededor de la gamba roja. El precio, ya elevado de por sí, oscila entre los 100 y los 110 euros por kilo, marcando un ascenso considerable en comparación con otras épocas del año. Pero, ¿qué hace tan especial a la gamba roja de Almería?

Origen de la gamba roja

En el epicentro de esta deliciosa historia se encuentra Garrucha, un pintoresco puerto pesquero ubicado en la costa de Almería. Aquí, la tradición pesquera y el respeto por la calidad se entrelazan para dar vida a las gambas rojas más exquisitas del mercado. Los pescadores locales han perfeccionado sus técnicas a lo largo de generaciones, convirtiendo a Garrucha en la cuna de este manjar marino.

Por qué es roja

Pero, ¿por qué la gamba roja no es roja cuando está en su hábitat natural? Sorprendentemente, este crustáceo se presenta como una criatura de tonalidad transparente mientras descansa en el lecho marino. Es únicamente cuando asciende a la superficie y entra en contacto con el aire que experimenta una metamorfosis fascinante, adquiriendo ese tono rojo tan característico.

Gambones, las Joyas Femeninas del Mar

Entre los secretos revelados en el Mercado Central, uno destaca con fuerza: las gambas más grandes, conocidas como gambones, son hembras. Este detalle añade un matiz interesante a la experiencia gastronómica, revelando la importancia de la selección cuidadosa durante la pesca para preservar la sostenibilidad y la calidad del producto.

De Garrucha a la Mesa Navideña

En estas fechas festivas, la gamba roja de Almería se convierte en un manjar digno de celebración. Su precio elevado refleja la demanda y la exquisitez de este producto que ha trascendido fronteras para conquistar paladares exigentes. Garrucha, con sus tradiciones y secretos bien guardados, continúa siendo el epicentro de una historia culinaria que se sirve en las mesas más selectas del país. Un viaje gastronómico que comienza en el fondo del mar y culmina en una explosión de sabor en cada bocado.