La construcción del viaducto para la Estación de Alta Velocidad en Vera avanza con el izado de vigas, una tarea de gran precisión que promete ser un referente en la ingeniería de la alta velocidad. Estos trabajos no solo son un desafío técnico, sino que también representan un avance significativo en la infraestructura de transporte.
Progreso en la construcción del viaducto
La construcción del viaducto de la Estación del AVE en Vera, que contará con cuatro vías, está alcanzando etapas cruciales. El proceso de colocación de 20 vigas de 190 toneladas cada una se desarrolla a un ritmo impresionante, con una precisión extrema, utilizando dos grúas de 300 toneladas de capacidad, guiadas por GPS y asistidas por equipos topográficos.
Situado a tan solo 100 metros de la futura estación, el viaducto representa un desafío tanto en ingeniería como en logística. Para la cimentación se han empleado más de 1.600 camiones cargados de hormigón, destinados a los 134 pilotes. Este viaducto está diseñado para albergar un tablero central con dos vías de alta velocidad para trenes que no requieren parada y dos tableros laterales para trenes que sí harán paradas.
Desafíos técnicos y logísticos
La construcción enfrenta desafíos significativos debido a la alta sismicidad y al riesgo de inundaciones en la zona. En concreto es el área con mayor incidencia sísmica, entre Lorca y Granada.
La considerable anchura del viaducto incrementa su masa, lo que ha requerido cálculos de gran complejidad y estrategias antisísmicas de vanguardia.
Este viaducto, que se incluirá en el catálogo de estructuras excepcionales de ADIF para la red de alta velocidad, representa un logro notable al ser el primero en la red que contará con cuatro vías. La inversión total para la línea de alta velocidad Almería-Murcia asciende a 3.300 millones de euros.