La Guardia Civil ha detenido a un hombre de 35 años, vecino de Albox (Almería), como presunto autor de los delitos de lesiones, robo con violencia e intimidación, odio y obstrucción a la justicia, cometidos contra otro vecino del mismo municipio, propietario de un negocio de hostelería. Según la investigación, el detenido y otro sospechoso, que se encuentra en paradero desconocido, habrían agredido y amenazado en varias ocasiones a la víctima por motivos de intolerancia y discriminación.
Los hechos se remontan al pasado mes de junio, cuando la víctima presentó varias denuncias en dependencias de la Guardia Civil, relatando que estaba siendo objeto de acoso y violencia por parte de dos individuos conocidos, que le habían causado lesiones que requirieron atención sanitaria y que le habían robado una cadena de oro durante una de las agresiones. Asimismo, manifestó que los agresores habían irrumpido en su establecimiento y habían provocado daños en el mobiliario y el menaje tras una discusión.
La Guardia Civil inició una investigación para esclarecer los hechos y localizar a los autores, utilizando diferentes medios tecnológicos y tomando declaración a testigos y afectados. Los agentes lograron identificar a los dos sospechosos y comprobaron que actuaban movidos por el odio hacia la víctima, a la que insultaban y vejaban.
A finales del mes de julio, la Guardia Civil procedió a la detención de uno de los implicados en el municipio de Albox, al que se le imputan los delitos mencionados anteriormente. El otro sospechoso habría abandonado el país tras los hechos y se encontraría en Portugal, según las gestiones realizadas por los investigadores. La Guardia Civil continúa con las diligencias para su localización y detención.
La investigación sigue abierta y no se descartan nuevas actuaciones. La Guardia Civil recuerda que los delitos de odio son aquellos que se cometen contra las personas por motivos discriminatorios relacionados con su identidad, su cultura, su religión, su orientación sexual o cualquier otra circunstancia personal o social. Estos delitos atentan contra la dignidad humana y los derechos fundamentales y deben ser denunciados ante las autoridades competentes.