Cada año, se registran 600 millones de casos de enfermedades alimentarias y 420,000 muertes por alimentos contaminados a nivel mundial. La UE destaca la importancia de la seguridad alimentaria en el Día Mundial correspondiente. Se enfoca en estar preparados para incidentes, abarcando higiene, salud animal, fitosanidad y control de contaminantes. La legislación y acciones de la UE promueven sistemas alimentarios justos y saludables, con la EFSA supervisando la seguridad alimentaria y el RASFF facilitando la rápida respuesta ante riesgos para la salud pública.
Cada año, se calcula que hay 600 millones de casos de enfermedades de origen alimentario en todo el mundo, y alrededor de 420 000 personas mueren después de comer alimentos contaminados. Aunque la UE cuenta con unos de los niveles más altos del mundo en materia de seguridad alimentaria, la importancia de esta no puede subestimarse. Esta es la razón por la que cada año conmemoramos el Día Mundial de la Seguridad Alimentaria en este día.
El tema de este año subraya la importancia de estar preparados para los incidentes de seguridad alimentaria, independientemente de que sean leves o graves. Se trata de situaciones en las que existe un riesgo potencial o confirmado para la salud asociado al consumo de alimentos como consecuencia, por ejemplo, de accidentes, controles inadecuados, fraude alimentario o acontecimientos naturales.
Sin embargo, la seguridad alimentaria abarca más que todo eso. Desempeña un papel fundamental a la hora de garantizar que los alimentos sigan siendo seguros en todas las fases de la cadena alimentaria, desde la producción, pasando por la cosecha, la transformación, el almacenamiento y la distribución, hasta la preparación y el consumo.
Aquí, en la UE, la política y la acción en materia de seguridad alimentaria también cubren toda la cadena alimentaria y se concentran en cuatro ámbitos principales de protección:
- Higiene alimentaria: de la granja a la mesa, las empresas alimentarias, incluidas las importadoras de alimentos, deben cumplir la legislación de la UE.
- Salud animal: los controles y medidas sanitarias para animales de compañía, animales de granja y animales silvestres controlan y gestionan las enfermedades y rastrean los movimientos de todos los animales de granja.
- Fitosanidad: la detección y erradicación de plagas en fase temprana impide su propagación y garantiza la salud de las semillas.
- Contaminantes y residuos: los controles mantienen a los contaminantes lejos de los alimentos y piensos.
La legislación alimentaria general regula la seguridad alimentaria en la UE. La Estrategia «De la Granja a la Mesa» pretende que los sistemas alimentarios sean justos, saludables y respetuosos con el medio ambiente.
La Autoridad Europea de Seguridad Alimentaria (EFSA) supervisa el trabajo en este sector y ofrece asesoramiento científico y evaluaciones de riesgo independientes que contribuyen a la elaboración de las normas de seguridad alimentaria de la UE. Como parte de las herramientas de seguridad alimentaria, el Sistema de Alerta Rápida para Alimentos y Piensos (RASFF) garantiza un intercambio rápido de información entre los países miembros para ayudar a las autoridades de seguridad alimentaria a reaccionar rápidamente en caso de riesgos para la salud pública derivados de la cadena alimentaria.
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