El Almería cerró a la media noche el “fiestón” que montó en el Estadio de los Juegos Mediterráneos para celebrar, con sus aficionados, el ascenso a Primera División. Fue el colofón a un intenso y emocionante día que arrancó por la tarde con el recorrido de los jugadores y técnicos por la ciudad en autobús descapotable. Todas las calles estuvieron a rebosar, como el Estadio para vivir el fin de fiesta.
La cantante Pilar Bogado y el guitarrista Guillermo Fernández, creador del himno del club, interpretaron éste, arrancando una gran ovación por parte de los seguidores rojiblancos, que con el Estadio apagado lo iluminaron con las linternas de sus móviles.
Era la fiesta del ascenso y el protagonismo era para los jugadores, que fueron presentados uno a uno para ir subiéndose al escenario, situado en el centro del campo, tras cubrir un recorrido con una alfombra roja y efectos especiales. Los futbolistas intervinieron para interactuar con el público. Un detalle; César de la Hoz, que fue uno de los últimos en salir, se quitó la camiseta del ascenso y debajo llevaba una rojiblanca con el número 23 y el nombre de Soriano, en recuerdo de unos los míticos del club. Fernando, el capitán, cerró la lista, y además como el mejor portero de la categoría.
Sadiq fue manteado, lo mismo que Rubi, que en su intervención agradeció el apoyo de la afición y agrupó a los jugadores para hacer la arenga de cada partido. Por cierto que el míster dijo que “como habréis visto hemos quitado las portería para que no tiremos penaltis”, en alusión a los numerosos fallados durante la temporada.
Tras subir también al escenario los integrantes del cuerpo técnico, cerró las intervenciones el director general, Mohamed El Assy, que manifestó públicamente su agradecimiento a la afición y destacó, ante los aplausos del público, que van a trabajar para que el Almería no vuelva más a Segunda. También tuvo un recuerdo para el propietario y presidente, Turki Alalshikh, cuyo nombre corearon los aficionados.
Luego, la copa que acredita al equipo como campeón de Liga fue protagonista y bajo el “We Are the Champions”, de Queen, llegó el momento álgido con los jugadores dando la vuelta al campo y celebrando el logro con los aficionados bajo los fuegos artificiales.