La Agrupación del PSOE de Almería ciudad acusa a la alcaldesa de falta de calidad democrática por su prepotente gestión del último Pleno, celebrado el pasado viernes, donde se insultó a concejalas socialistas, se expandieron bulos y se hurtó a la portavoz del PSOE, Adriana Valverde, su legítimo derecho a réplica durante una moción.
El PSOE de Almería lamenta profundamente que la alcaldesa, María Vázquez, no censurara a la portavoz del PP, Sacramento Sánchez, tras decirle a la concejala del PSOE que en el auditorio “hace fresquillo de más, a no ser que tenga usted otras cosillas que le hagan tener más calor de lo normal”, en una clara referencia con sesgo machista a la posibilidad de que la concejala socialista tuviera la menopausia.
No solo no reprendió a su compañera de partido, sino que, ante la petición de “respeto” de Carmen Aguilar, la alcaldesa respondió a la bancada socialista: “llevan ustedes todo el pleno cacareando”, otra expresión desafortunada.
En otro momento del Pleno, el concejal de Cultura, Diego Cruz, difundió el bulo de que el PSOE tenía contratados los autobuses de militantes que fueron a Madrid en apoyo de su secretario general, Pedro Sánchez, “tres semanas antes” de que Sánchez hubiera anunciado los días de reflexión.
El PSOE de Almería ciudad ha denunciado la manera chabacana de hacer política del PP y, también, ha reprochado al equipo de Gobierno que utilice los plenos para tirar del argumentario nacional del PP, en lugar de defender su gestión municipal con argumentos sólidos.
Para el PSOE, el Pleno del Ayuntamiento de Almería está para hablar de las cuestiones que preocupan a los almerienses, no para seguir el argumentario nacional del señor Feijoo.
Si bien el Pleno estuvo plagado de actitudes despóticas por parte de la alcaldesa, una de las cuestiones más graves fue su negativa a dar la palabra a la portavoz socialista cuando legalmente le correspondía, tras el debate de una moción no resolutiva (la presentada sobre ‘La Tertulia’ de Interalmería), según el artículo 95 del Reglamento Orgánico del Pleno.
La alcaldesa hurtó al PSOE su legítimo derecho a réplica en el debate de una moción muy importante sobre los insultos y ridiculizaciones hacia representantes de los ciudadanos que no son del PP, en un programa de la televisión municipal, pagada con los impuestos de todos los almerienses.
La alcaldesa y el PP no tienen bastante con censurar la publicación de contenidos en determinados medios de comunicación de nuestra ciudad, también quieren silenciar la voz de la oposición en el máximo órgano de representación política de la ciudadanía en Almería.
Por mucha mayoría absoluta que tenga el PP, el PSOE fue votado por 18.156 almerienses a los que vamos a defender en cada Pleno, en la calle y donde haga falta. La ciudad de Almería y el Ayuntamiento no pueden ser el cortijo del PP y de unos pocos, y, menos aún, un instrumento al servicio de la máquina del fango del PP a nivel nacional.