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OBITUARIO

En recuerdo de Andrés, una mente portentosa

sábado 26 de junio de 2021, 10:25h

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El 23 de junio falleció en Cuevas del Almanzora (Almería) a los 54 años, a consecuencia de un ictus, Andrés Santos Soler González, una persona con unas capacidades intelectuales fuera de lo común.
Andrés realizó la tesis doctoral en el Departamento de Bioquímica y Biología Molecular I de la Universidad de Granada (UGR), y obtuvo el premio extraordinario de doctorado. Fue profesor de varias asignaturas, y en su carrera investigadora destaca su estancia en la Universidad de Cambridge (Inglaterra), gracias a la cual uno de sus artículos lo firmó junto a Greg Winter, quien años más tarde (en 2018) ganó el premio Nobel de Química. Andrés contagiaba el entusiasmo de su visión evolutiva de la naturaleza, que le llevó a ahorrar durante años para poder visitar lugares emblemáticos del histórico viaje de Charles Darwin a bordo del Beagle.
En 2017, ya fuera de la UGR, esa visión y su singular talento se plasmaron en una obra excepcional: un libro de alta divulgación que parece fruto del tenaz esfuerzo de un equipo de expertos (Andrés analizó críticamente miles de artículos científicos), no de un solo biólogo que, desde su pueblo, dependía del material bibliográfico que se le pudiera hacer llegar gracias a los medios de la UGR. El libro, subvencionado por el Ministerio de Educación, tiene como hermoso título "El sueño de Darwin. Genómica y el árbol de la vida" (Ed. Arráez). Fue presentado académicamente en la Facultad de Ciencias de la UGR y popularmente en el cine-teatro Echegaray, de Cuevas, a rebosar de vecinos que le manifestaron su cariño y admiración.
Aunque no creo que sirva de mucho consuelo a esos vecinos, y menos a sus familiares, sepan que en el que fue su Departamento de la UGR, y más allá de él, somos muchos los que hemos lamentado profundamente el sufrimiento y la muerte de Andrés, y nos seguimos asombrando al rememorar sus excepcionales capacidades, que no pudieron fructificar todo lo que merecían. Permanezca muy vivo el recuerdo del querido Andrés, del sueño que compartió con Darwin, y de su mente portentosa.
Juan Antonio Aguilera Mochón. Univ. de Granada