Leo en la prensa sevillana, cercana a los movimientos del Psoe, las movidas que se están empezando a dar en las distintas provincias ante la llegada de la nueva jefa, María Jesús Montero. Por estos derroteros solo nos interesan las cuestiones que afectan a los almerienses, y por lo que se cuenta, a Juan Antonio Lorenzo, actual secretario provincial de los sanchistas en la nuestra lo dan por amortizado. Apuntan que el enfado de Marichú con Juan Antonio es sonado, viene de aquella votación perdida por el gobierno, ante la falta del caballero sentado en su escaño en el hemiciclo, y no poder votar. Parece que se la tiene guardada, y que le va a costar al cargo.
No debe preocuparse demasiado don Juan Antonio, le buscarán alguna otra salida para que no pierda el sueldo público. Viene ocurriendo en todos los partidos a lo largo de los años, te saco del asfalto, te aparco en la acera, pero te dejo un sueldo para que no te revuelvas contra el jefe, en este caso la jefa. Lo que se busca es saber quién puede sustituir al que fuera alcalde de Serón. Están los que apuestan por Antonio Martínez. Se viene postulando, aquí lo mencionamos hace unas semanas, y ha dejado caer algunas perlas en la prensa sobre lo que quiere que sea el futuro del partido. En estos momentos, como secretario de organización, está en buena posición para lograr los votos de las agrupaciones, pero, habrá que esperar a lo que diga la señora, y la señora es de armas tomar.
Voces indican que puede ser una mujer la que lidere el partido de Sánchez en Almería, y nada nos extrañaría que así fuera. Feminista, defensora del empoderamiento de la mujer, es de imaginar que querrá ver a las mujeres, militantes sanchistas, en los poderes de las provincias andaluzas. Almería tiene en estos momentos a una mujer en la alta dirección de la ejecutiva de la formación, Anabel Mateos, con la ventaja, aunque a algunas no les guste, de ser la esposa de un alto cargo del gobierno de Sánchez, Antonio Hernando. ¿Dejamos a Antonio Hernando fuera de la lucha por la secretaría? Yo no lo haría. Unas futuras elecciones, con las encuestas que corren por la península, deben hacer pensar al señor Hernando que debe buscar una futura salida, no solo para su esposa, también para él.
Si como aseguran en la lejana Sevilla, Juan Antonio Lorenzo está amortizado, aunque es de suponer que el hombre luchará con todas sus fuerzas para no quedar descartado, los movimientos en la provincia van a comenzar, a la espera de que llegue el mensaje desde la ministra de hacienda, algo parecido a lo ocurrido con Espada, Andalucía tenía que esperar el mensaje de Pedro, y Almería estará pendiente de la palabra de Marichú. Dos nombres se apuntan: Anabel y Antonio Martínez. ¿Y no puede haber un tercero, también de nombre Antonio y Hernando de apellido? El tiempo de los congresos cada vez más cerca.
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