Esta es la lista de espera en Dependencia en Almería

Según los datos publicados por el Boletín Oficial del Parlamento de Andalucía, a finales de 2022 había 84.109 andaluces en situación de dependencia que aún no habían recibido las prestaciones o servicios que les corresponden por ley. De ellos, 47.503 estaban pendientes de que se resolviera su solicitud de grado y 36.606 tenían reconocido el derecho pero no habían sido atendidos.

La provincia con más personas en lista de espera era Sevilla, con 23.493, seguida de Málaga, con 14.086, y Granada, con 9.944. Por el contrario, las provincias con menos personas en espera eran Huelva, con 1.357, y Almería, con 3.436.

Entre los municipios, destacan los casos de Sevilla capital, con 3.807 personas en lista de espera; Dos Hermanas, con 1.279; y Almería capital, con 1.151. En el otro extremo, se encuentran los municipios de El Palmar de Troya y Almócita, que no tenían ninguna persona en espera.

En la provincia de Almería, el municipio con más personas en lista de espera era Almería capital, con 1.151, seguido de El Ejido, con 378, y Roquetas de Mar, con 314. Por el contrario, los municipios con menos personas en espera eran Alboloduy, Alicún, Almócita, Bayárcal, Bentarique, Canjáyar, Chercos, Enix, Felix, Fondón, Instinción, Laujar de Andarax, Ohanes y Padules, que no tenían ninguna persona en espera.

Entre los municipios almerienses que tenían más de cien personas en lista de espera se encontraban también Adra (141), Huércal-Overa (131), Vícar (128), Níjar (164), Berja (104) y Cuevas del Almanzora (103). Entre los que tenían menos de diez personas en espera estaban Alhabia (9), Alhama de Almería (8), Benahadux (7), Carboneras (6), Gádor (6), Huécija (6), Illar (6), Líjar (6), Lucainena de las Torres (6), Olula del Río (6), Pechina (6), Rágol (6), Santa Cruz de Marchena (6), Senés (6) y Turre (6).

CÓMO SE FINANCIA EL SISTEMA

El sistema de dependencia en Andalucía se financia con la participación de la Administración General del Estado (AGE) y la Junta de Andalucía, así como con las aportaciones de las personas beneficiarias de las prestaciones, según el sistema de copago que se establezca.

La financiación del sistema se basa en tres niveles de protección:

• El nivel mínimo, que debe ser abonado íntegramente por la AGE, en función del número de personas en situación de dependencia que se encuentren recibiendo una prestación efectiva.
• El nivel acordado, que se basa en la celebración de convenios de colaboración entre la AGE y las comunidades autónomas. La financiación de la AGE se distribuye entre las comunidades autónomas en función de una serie de variables y criterios predefinidos.
• El nivel adicional, que es potestativo por parte de las comunidades autónomas, y cuya financiación corre exclusivamente a cargo de las mismas.

Además, existen otras partidas económicas de naturaleza excepcional, destinadas a la financiación de actuaciones relacionadas con la atención a las personas en situación de dependencia e impulso del sistema.

Según el convenio firmado entre la AGE y la Junta de Andalucía para el año 2022, la AGE aportará un total de 1.497.375.858,17 euros para la financiación del nivel mínimo y el nivel acordado. La Junta de Andalucía aportará, con cargo a sus propios presupuestos, un crédito inicial de la misma cantidad.

Sin embargo, la Junta de Andalucía ha reclamado un Fondo de Garantía para mejorar la financiación del sistema de dependencia, ya que actualmente está asumiendo el 82% del coste del mismo. La consejera de Inclusión Social, Juventud, Familias e Igualdad, María Dolores López Gabarro, ha planteado un Pacto de Estado para que el Gobierno central se haga cargo del 50% del coste de la atención a la dependencia en las comunidades autónomas.

QUÉ OFRECE EL SISTEMA

Las prestaciones que ofrece el sistema de dependencia son las siguientes:

• Servicios: son las actuaciones, programas o actividades de carácter profesional destinadas a la prevención de las situaciones de dependencia, la promoción de la autonomía personal y la atención a las personas en situación de dependencia. Los servicios se clasifican en:
  • Servicios de prevención de la dependencia y promoción de la autonomía personal: son los que tienen por objeto prevenir el deterioro cognitivo, físico o sensorial, así como fomentar las capacidades personales y la participación social. Algunos ejemplos son: el servicio de teleasistencia, el servicio de prevención de la dependencia y promoción de la autonomía personal, el servicio de habilitación y terapia ocupacional, el servicio de promoción de la salud y el servicio de ocio y tiempo libre.
  • Servicios de atención a la dependencia: son los que tienen por objeto atender las necesidades básicas, personales, domésticas, sociales o educativas de las personas en situación de dependencia. Algunos ejemplos son: el servicio de ayuda a domicilio, el servicio de centro de día o de noche, el servicio residencial, el servicio de asistencia personal y el servicio de atención temprana.
• Prestaciones económicas: son las cuantías económicas que se reconocen a las personas en situación de dependencia cuando no sea posible el acceso a un servicio público o concertado del catálogo de servicios o, excepcionalmente, cuando así lo acuerden los órganos competentes. Las prestaciones económicas se clasifican en:
  • Prestación económica vinculada al servicio: es la que se reconoce a las personas en situación de dependencia que requieren un servicio adecuado a su grado y nivel de dependencia y que no pueden acceder al mismo en la red pública o concertada. Esta prestación tiene por objeto facilitar la financiación del coste del servicio privado que elija la persona beneficiaria.
  • Prestación económica para cuidados en el entorno familiar y apoyo a cuidadores no profesionales: es la que se reconoce a las personas en situación de dependencia que reciben cuidados en su domicilio por parte de sus familiares o personas del entorno. Esta prestación tiene por objeto contribuir a la compensación del coste que supone para los cuidadores no profesionales la atención a las personas en situación de dependencia.
  • Prestación económica de asistencia personal: es la que se reconoce a las personas en situación de dependencia con gran capacidad de autogobierno que requieren el apoyo personalizado e individualizado para realizar actividades básicas o instrumentales de la vida diaria. Esta prestación tiene por objeto facilitar el acceso al mercado laboral, a la educación o a cualquier otra actividad que favorezca su autonomía personal.