Una extensa operación policial desarrollada este miércoles en la localidad almeriense de Pechina ha logrado desarticular una trama vinculada al tráfico de drogas, armas y un sofisticado sistema de fraude en el suministro eléctrico. Bajo secreto de sumario del Juzgado número 2 de la capital, las autoridades investigan la posible implicación de una veintena de detenidos, según fuentes judiciales consultadas. La cifra, aún no confirmada oficialmente, refleja la magnitud de una intervención en la que participaron 400 agentes —300 de la Policía Nacional y 100 de la Guardia Civil—, en una de las mayores movilizaciones recientes en la provincia.
El operativo permitió desmantelar 115 puntos de conexión ilegal a la red eléctrica, instalaciones fraudulentas que eran manipuladas para evadir el control de consumo. Personal especializado de Endesa, acompañado en todo momento por efectivos policiales como medida de seguridad, ejecutó los cortes técnicos en 52 viviendas registradas. Estas intervenciones, focalizadas en núcleos urbanos de Pechina, buscaban erradicar un sistema organizado que, según las pesquisas, habría generado pérdidas económicas sustanciales y riesgos para la seguridad pública debido a las manipulaciones en infraestructuras críticas.
La operación, coordinada entre cuerpos policiales y la compañía eléctrica, se enmarca en una investigación más amplia sobre delitos contra la salud pública —por narcotráfico— y tenencia ilícita de armas. Aunque las autoridades no han detallado las cantidades incautadas de drogas o arsenal, la simultaneidad de los registros sugiere vínculos entre las actividades delictivas.
El despliegue, que mantuvo en alerta a la localidad durante horas, incluyó controles perimetrales y dispositivos de seguridad para garantizar el desarrollo sin incidentes. Las fuentes judiciales insistieron en la provisionalidad de los datos, dado que la investigación sigue su curso bajo reserva, y recordaron que el número definitivo de detenidos podría variar conforme avancen los análisis de las pruebas incautadas.
Endesa, por su parte, destacó en un comunicado la colaboración con las fuerzas de seguridad para combatir el fraude eléctrico, un delito que no solo afecta a la compañía, sino que compromete la estabilidad de la red y pone en riesgo a vecinos y trabajadores. La operación en Pechina se consolida así como un golpe significativo a economías clandestinas interconectadas, en un caso que podría revelar nuevas dimensiones conforme se levante el secreto de sumario.
Mientras el Juzgado número 2 de Almería dirige las diligencias, la comunidad de Pechina aguarda respuestas sobre un operativo que ha destapado una trama delictiva arraigada, subrayando la complejidad de las redes ilegales en entornos locales.
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