Nos avisaron con tiempo de la llegada del ministro de los retrasos de trenes, del ese Ave que volará sobre Lorca (por algo es una ave) para llegar a Almería en el 2026, el que quiere que el próximo año paguemos en las autovías. Lo de avisarnos con tiempo fue para que no se nos ocurriera subirnos a un tren ese día, martes y trece, nada menos. Lo que toca se retrasa, o se anula, o te dejan tirado en cualquier cuneta de esta España confederal en la que nos ha metido Sánchez sin pasar por la constitución. Y para qué va a pasar por la consti, si tiene allí al Pumpi. También tiene usted razón, no le hace falta. No había caído uno de que con Pumpi cambia la consti cada mañana, según los intereses del marido de la inocente Begoña, Begoña.
Recuerdo a un importante sindicalista de Ccoo al que algunos le decían hace muchos años el “pumpi”, pero no tiene nada que ver con el que da brillo y esplendor, con buena bayeta y mejor crema, a la carrera política de Sánchez desde el alto tribunal.
Si por casualidad tenía billete para ese día, y se enteró que es el mismo en el que estará en estas tierras el señor Puente, ministro de que los trenes lleguen tarde, y de que vuele el Ave sobre Lorca (por algo es una ave), cambió el billete, o se buscó un blablacar si no tenía más remedio que viajar un martes y trece y con la visita del ministro bocas en Almería. El que nos avisaba no era un traidor. Lo que le pudo ocurrir, si no hizo caso es culpa suya. Avisado estaba.
El hombre no vino solo, se hizo acompañar con Bolaños, el chico despeinado del gobierno a echarse la foto entre las obras del ave, se quitaba del horno candente levantado con la fuga de Puigdemont. No ha sido culpa suya, él estaba en los juegos olímpicos consiguiendo la medalla de oro en la división de poderes de este país. Tras un fin de semana jugando al golf, una foto en algunas de las obras que Adif tiene en marcha en Almería, para que la prensa de papel recoja al día siguiente lo mucho y bien que se viene trabajando en el Ave volador de Almería, les venía de perlas a los dos ministros. Lo que no se sabía en el momento de preparar el viaje es si iba a estar a su lado el director de Adif, que como saben ustedes no sale de un juicio el hombre cuando otro le cae sobre la cabeza. Ay, los contratos, los contratos. Estuvo, estuvo. Callado, pero estuvo. No mantuvo la teoría de que el Ave llegará a las tierras de nuestra seca provincia en el 2026, lo ha dejado para esta legislatura. Ni él se fía. Y para que conste, el gobierno de Pedro Sánchez se gasta medio millón diario en esta provincia. Seguro que la ministra Montero nos asegurará un día de estos que esa cantidad no se la gasta el gobierno ni en Cataluña.
¿A qué vinieron los ministros? Se pregunta el personal. ¿Se inauguró algo? No. ¿Solo a la foto? Solo a la foto. Y para eso dos ministros, el jefazo de Adif y toda la cuadrilla detrás. Para eso. ¿No vendría a meter la bolita en el hoyo? ¿Cuánto nos costó el viaje a los ciudadanos? Que te lo van a contar, venga ya.