Funcionarios municpales protestan en la Plaza de la Constitución

Funcionarios, personal laboral y bomberos de Almería se manifestaron hoy en la capital para reclamar un convenio digno y mejores condiciones laborales, después de seis meses de negociaciones infructuosas con el Ayuntamiento.

La protesta, que partió desde el Parque de Bomberos y llegó hasta la Plaza Vieja, contó con la participación de bomberos, funcionarios y personal laboral del Ayuntamiento de Almería, que exigieron un convenio que les garantice derechos y condiciones laborales justas. Los manifestantes, encabezados por los bomberos, portaban pancartas y camisetas con lemas como "Quemados" y "Bomberos sin derechos", en alusión a la situación de desprotección en la que se encuentran.

Serafín Serantes, presidente del Sindicato de Policía Local y Bomberos, denunció que "seguimos con una propuesta nula por parte del Ayuntamiento, no han ofrecido absolutamente nada. Las reuniones son mínimas". También recordó que "en nuestro caso, como UPLV, venimos a manifestarnos también porque ya tenemos dos sentencias en las que se vulneran nuestros derechos constitucionales a estar en la negociación y no han convocado ni una mesa de funcionarios siquiera".

Entre las reivindicaciones de los manifestantes se encuentran la solicitud de nocturnos y festivos, así como la demanda de una formación especializada para los bomberos. "Solo tenéis que pasar por el parque", dijo Serantes, refiriéndose a la situación de las instalaciones del Parque de Bomberos, que aseguran están anuladas las visitas de los colegios debido a obras que no han comenzado.

Pepe Martín, portavoz de la UGT, también se dirigió a los manifestantes, exigiendo "un convenio digno, una recuperación de derechos ya real y queremos avanzar en la negociación del convenio. No puede ser que llevemos seis meses esperando a una respuesta por parte del equipo de gobierno".

La protesta de hoy en Almería es solo el comienzo de una serie de movilizaciones que se avecinan, según anunciaron los organizadores. La próxima vez, la presión sobre el Ayuntamiento será aún mayor.