Los protocolos establecidos por el Ministerio de Sanidad, que durante el Estado de Alarma por la crisis sanitaria del COVID19, es la máxima autoridad en este ámbito, no permite hacer test a personas asintomáticas, aunque éstas se encuentren en situación de riesgo, por lo que ni el personal ni los internos de la residencia Valleluz de Íllar que no presentan síntomas son analizados.
En esta residencia, desinfectada por la Unidad Militar de Emergencias, ocho personas dieron positivo, y una de ellas ha sido trasladada al Hospital Universitario Torrecárdenas tras agravarse los síntomas derivados de la enfermedad.
La paciente estaba aislada desde el primer momento que se le detectó el virus, como otros cinco residentes, mientras que dos trabajadores también contagiados, están en cuarentena en sus domicilios.
Pero no son los únicos casos, ya que del total de contagiados en Almería a miércoles uno de abril, 14 son personas mayores internas en residencias, pero el Ministerio impide que se hagan test a los demás internos y al personal si no presentan síntomas previos, por lo que si están contagiados, podría ser tarde para las personas mayores, mientras que los empleados, podrían estar expandiéndolo por su entorno familiar sin saberlo.
En la de Íllar, hay unos 50 usuarios y unos 20 trabajadores a los que no se les han hecho pruebas, si bien la delegada del Gobierno andaluz en Almería, Maribel Sánchez, declaraba a Noticias de Almería, que era necesario que pudieran hacerse test a personas en estas circunstancias, asintomáticas pero que están en situación de riesgo claro de ser portadoras del virus.
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