Isidro Fainé apoya nombramiento de Murtra en Telefónica

En un movimiento que ha sorprendido al mercado bursátil y al sector de las telecomunicaciones, el Gobierno español, liderado por Pedro Sánchez, ha ejecutado un cambio en la presidencia de Telefónica, colocando a Marc Murtra como nuevo presidente ejecutivo de la compañía. Esta decisión se ha dado en el contexto de una reciente reestructuración accionarial en la que el Estado, a través de la Sociedad Estatal de Participaciones Industriales (SEPI), ha adquirido un 10% de las acciones de Telefónica, lo que le ha otorgado un rol significativo en la toma de decisiones.

El Gobierno ha utilizado su participación para influir en la gestión y en la composición del consejo de administración de la teleco. Marc Murtra, hasta ahora presidente de Indra y miembro del patronato de la Fundación La Caixa, ha sido propuesto y aprobado como sustituto de José María Álvarez-Pallete, el cual había estado al frente de la operadora durante casi nueve años. Este cambio fue aprobado en un consejo extraordinario, donde se aseguró el apoyo necesario para el nombramiento de Murtra, incluyendo el beneplácito de Criteria Caixa, presidida por Isidro Fainé, y de la compañía saudí STC, que posee un 9,9% del capital de Telefónica.

La SEPI ha jugado un papel crucial al adquirir el 10% de la empresa tras la entrada de STC en el capital de Telefónica en 2023, con el objetivo declarado de proteger la "españolidad" de la compañía y equilibrar las influencias externas. Esta estrategia no solo ha permitido al Gobierno tener una voz directa en el consejo, sino que también ha abierto la puerta para colocar a figuras afines a su administración en posiciones clave.

Implicaciones y Reacciones

Isidro Fainé, presidente de CriteriaCaixa y vicepresidente de Telefónica, ha sido crucial en este proceso. Fuentes indican que Fainé no se opuso al nombramiento, lo cual fue visto como una señal de apoyo tácito a la maniobra gubernamental, garantizando así que Criteria mantendría su influencia dentro de la operadora. Por otro lado, STC, con su paquete accionarial significativo, también dio su respaldo al cambio, evitando así posibles fricciones en el consejo.

Este movimiento ha generado un amplio debate sobre la intervención del Estado en empresas privadas, especialmente en sectores considerados estratégicos. Críticos han señalado que esta acción podría preceder a una mayor politización de la gestión de Telefónica, aunque el Gobierno ha argumentado que busca asegurar la estabilidad y la continuidad de una empresa clave para la economía y la tecnología españolas.

Desde el punto de vista de los mercados, la acción ha tenido un impacto positivo en la cotización de Telefónica, con los inversores viendo en la continuidad y el cambio de liderazgo un signo de estabilidad y dirección clara. Sin embargo, también se ha especulado sobre posibles tensiones futuras dentro del consejo, dada la configuración actual de los asientos y el equilibrio de poder entre los diferentes accionistas.

El nombramiento de Marc Murtra como presidente ejecutivo de Telefónica refleja una consolidación del poder gubernamental en una de las empresas más importantes de España, con un claro objetivo de mantener el control estratégico. Este cambio también subraya la complejidad de la gestión corporativa en empresas con múltiples intereses accionariales y la influencia que puede tener el Estado cuando se convierte en un actor relevante en el accionariado.

SAUDÍES

STC, abreviada de Saudi Telecom Company, fue fundada el 21 de abril de 1998 bajo el decreto real M/35, comenzando sus operaciones el 2 de mayo de ese mismo año. Fue inicialmente una empresa totalmente propiedad del gobierno saudí, pero en 2002, el 30% de sus acciones se vendieron al público, incluyendo a ciudadanos saudíes y organizaciones de seguros y pensiones.

Desde su creación, STC ha ampliado su alcance más allá de los servicios de telecomunicaciones tradicionales, diversificándose en una amplia gama de servicios digitales y tecnológicos. En 2022, aumentó su capital en un 150%, alcanzando los 50 mil millones de riyales saudíes, apoyando así su estrategia de crecimiento y expansión.

STC opera en múltiples sectores incluyendo telecomunicaciones, infraestructura digital, computación en la nube, ciberseguridad, Internet de las Cosas (IoT), inteligencia artificial, pagos digitales, medios digitales y entretenimiento digital.

Aunque su sede principal está en Riad, Arabia Saudí, STC ha expandido sus operaciones a nivel internacional, con presencia en 11 países, sirviendo a más de 170 millones de clientes. La compañía tiene subsidiarias y participación en empresas en Kuwait, Baréin, y ha hecho incursiones en Europa y Asia.

Inversiones y Expansión

Uno de los movimientos más destacados de STC fue la adquisición de un 9,9% de las acciones de Telefónica en 2023, convirtiéndose en el mayor accionista de la compañía española. Esta inversión ascendió a 2.100 millones de euros y fue vista como una estrategia para penetrar más profundamente en el mercado europeo.

STC ha realizado inversiones significativas en la infraestructura digital, tanto dentro como fuera de Arabia Saudí. Por ejemplo, a través de su subsidiaria TAWAL, adquirió torres de telecomunicaciones en Pakistán y ha comenzado operaciones en Europa.

La compañía ha sido pionera en la implementación de redes 5G, iniciando este servicio en 2021. Además, ha establecido fondos de inversión corporativos para apoyar startups en sectores como ciberseguridad, IA, y blockchain, reflejando su compromiso con la innovación tecnológica.

El 64% de STC es propiedad del Fondo de Inversión Pública de Arabia Saudí (PIF), lo que refleja una fuerte influencia estatal. El resto de las acciones están en manos de inversores institucionales y particulares.

La empresa está dirigida por un consejo de administración, con Mohammed K. A. Al Faisal como presidente. El CEO de STC, Olayan Alwetaid, ha liderado la estrategia de crecimiento y expansión internacional de la compañía.

Con una capitalización de mercado que ronda los 49.200 millones de euros, STC es uno de los mayores operadores de telecomunicaciones en Oriente Medio.
La compañía ha recibido varios premios por su innovación y liderazgo en el sector de las telecomunicaciones, incluyendo el GSMA T-ISAC Award 2024 por excelencia y liderazgo en ciberseguridad.

Este perfil resalta la transformación de STC de una empresa de telecomunicaciones nacional a un gigante digital con ambiciones globales, destacando su papel crucial en la economía digital de Arabia Saudí y más allá.