La consejera de Agricultura, Pesca, Agua y Desarrollo Rural, Carmen Crespo, ha expresado su anhelo de que las discusiones sobre los Totales Admisibles de Capturas (TAC) y las cuotas para el año 2024, que inician este fin de semana en Europa, arrojen luz sobre un sector pesquero que ha experimentado recortes significativos en los últimos años, tanto en volumen como en días de faena. En particular, la atención se centra en la vitalidad de la flota andaluza y su conexión con la gamba roja del Mediterráneo, siendo Garrucha un punto clave para la pesca de esta apreciada especie.
Crespo ha expresado su esperanza de que la propuesta inicial de Bruselas experimente modificaciones que eviten nuevas reducciones en Andalucía. Se teme que medidas europeas podrían reducir el calendario de faena de 40 embarcaciones de arrastre a unos 120-130 días al año, un calendario insostenible que podría forzar el cese de la actividad pesquera.
En este contexto, Crespo ha destacado que los armadores y tripulantes andaluces ya han implementado medidas de recorte impuestas por Bruselas, algunas de las cuales ponen en entredicho la viabilidad de las embarcaciones. La consejera subraya la importancia de equilibrar la sostenibilidad ambiental con la sostenibilidad social y económica, asegurando el bienestar de las numerosas familias que dependen de esta actividad.
En cuanto al establecimiento de cuotas, la consejera insiste en que el Estado garantice informes técnicos actualizados para que la Comisión Europea tome decisiones informadas sobre los caladeros. Propone un establecimiento de cuotas y TAC cada dos años, en concordancia con la frecuencia de los informes científicos, para asegurar una toma de decisiones más precisa y ajustada a la realidad.
El director general de Pesca y Acuicultura de la Consejería, José Manuel Martínez Malia, viaja a Bruselas junto con el sector pesquero andaluz para abogar por la posición de la comunidad autónoma en este debate crucial.
Entre las especies de interés para la flota andaluza sujetas a TAC se encuentran la aguja o marlin azul, la aguja blanca del Atlántico, el atún blanco o bonito del norte, entre otras. Destaca también la importancia de las cuotas para la sardina, la tintorera o caella, y especialmente la gamba roja del Mediterráneo, una especie emblemática cuya pesca desempeña un papel central en la economía y tradición de la región.