El año que acabamos de comenzar arroja unas excelentes previsiones económicas para nuestro país, tanto que España será la locomotora de Europa este 2025 ya que crecerá triplicando la media de la Unión. Lo acabamos de ver con los datos de empleo. Somos líderes de la UE en creación de empleo y hay casi 3,7 millones de trabajadores más con contrato indefinido desde la aprobación de la Reforma Laboral –a la que se opusieron las derechas-. Almería también experimenta las consecuencias del buen estado de la economía nacional. Al cierre de 2024, la cifra de paro era la más baja en un mes de diciembre desde 2007, cuando la provincia tenía un 15% menos de población.
El empleo va a seguir creciendo. Tanto que el Gobierno de España espera crear medio millón de nuevos puestos de trabajo hasta superar la barrera de los 22 millones de afiliados a la Seguridad Social, lo que haría de 2025 otro año de récord en materia laboral. Además, el Salario Mínimo Interprofesional (SMI) seguirá subiendo. Ya lo hizo un 5% el pasado año situándose en 1.134 euros; lo que supuso un incremento del 54% desde 2018, cuando Pedro Sánchez llegó a Moncloa.
Este es el horizonte que los socialistas planteamos a las y los españoles con estas y otras medidas económicas y de carácter social con las que nos hemos situado ya a la vanguardia de Europa. Cabe recordar las 25 nuevas leyes aprobadas por el Gobierno de España que nos han convertido en un país más justo y más digno.
Frente a nosotros se encuentra una oposición que lo único que hace son malos y fallidos augurios en lo económico y en lo político. Feijóo decía que el Gobierno no superaría 2024 y aquí estamos. Seguro que en diciembre de 2025 dirá que no pasaremos de 2026 y todo ello después de un año en el que, a buen seguro, seguirá oponiéndose a otras grandes medidas económicas y sociales que impulsará Pedro Sánchez y que redundarán en el progreso de nuestro país, tal y como ha venido sucediendo desde hace seis años. La negativa del PP a sumarse a este desarrollo quedará para mofa en la Historia porque, además de equivocarse una y otra vez, se le recordará como el rey de los bulos, de la manipulación y de la desinformación, siendo un líder mucho más entretenido en otras cuestiones más triviales que en lo verdaderamente importante. En esto, en lo vital, ya está el PSOE y así lo estamos demostrando.