En una revelación que ha sacudido el panorama político español, han salido a la luz mensajes de WhatsApp que demuestran una comunicación directa entre el empresario y presunto comisionista Víctor de Aldama y la exministra de Industria, Comercio y Turismo, Reyes Maroto. Estos mensajes contradicen las anteriores declaraciones de Maroto, quien había negado cualquier tipo de relación con Aldama.
El intercambio de mensajes, fechados el 5 de agosto de 2020, muestran a Maroto disculpándose por un retraso y facilitando a Aldama el contacto con Miguel Sanz, entonces nuevo director de Turespaña, para que se pusieran en contacto. Este hecho se produce en un contexto en el que Aldama está implicado en la trama de corrupción conocida como el 'Caso Koldo', donde se le acusa de ser el "nexo corruptor" entre el empresariado y altos cargos del Gobierno.
La captura de pantalla de estos mensajes fue publicada por 'El Confidencial', generando un debate sobre la transparencia y la integridad de los políticos en ejercicio. Reyes Maroto, ahora portavoz del PSOE en el Ayuntamiento de Madrid, había retado previamente a Aldama a presentar pruebas de sus afirmaciones, afirmando que lo único que había hecho era "trasladar una serie de afirmaciones sin pruebas" y que cualquier prueba presentada por Aldama había sido desmontada.
Estos mensajes no solo evidencian una relación directa entre ambos personajes, sino que también sugieren un posible tráfico de influencias, especialmente considerando que Aldama ha declarado que Maroto y otros miembros del Gobierno le atendían a petición de José Luis Ábalos, exministro de Transportes.
La situación ha llevado a críticas y llamamientos a la transparencia desde diversos sectores políticos y sociales. La defensa de Maroto ha optado por no pronunciarse sobre estos mensajes específicos, lo que ha aumentado la presión sobre ella para aclarar su relación con Aldama y el uso de su posición ministerial para posibles favores.
Este caso se suma a otros escándalos recientes que han afectado al PSOE y al gobierno de Pedro Sánchez, poniendo de relieve las complejidades de la política española y las relaciones entre el poder y el negocio. La opinión pública y los medios continúan analizando cada nuevo detalle de este entramado, esperando más aclaraciones y, posiblemente, nuevas revelaciones que podrían afectar aún más a la imagen de los implicados.
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