El alcalde de El Ejido ha dicho que “esta normativa goza de un amplio consenso de partida, ya que cuenta con el apoyo de profesionales sanitarios, colectivos ecologistas, grupos de la oposición y presidentes de las Juntas Locales”
Ya está casi todo listo para que la Ordenanza Municipal sobre la ‘Prevención y Control de Mosquitos y Moscas’ se lleve a Pleno el próximo mes de septiembre con la intención de que sea aprobada de manera inicial. Este importante texto, que ha permanecido en exposición pública desde el 14 de julio al 25 de agosto, tan sólo ha recibido una alegación que ya está siendo atendida por la concejalía de Agricultura de cara a enriquecer este importante texto que cuenta con 43 artículos, 4 disposiciones adicionales y 2 transitorias.
El siguiente paso será someterla otra vez a exposición pública y requerirá nuevamente del beneplácito de la Corporación Municipal. De esta forma, el documento se podría poner ya en marcha a principios del mes de octubre.
El alcalde de El Ejido, Francisco Góngora, ha puesto el acento en que “esta normativa goza de un amplio consenso de partida, ya que cuenta con el apoyo de profesionales sanitarios, colectivos ecologistas, grupos de la oposición, la Universidad de Almería o presidentes de las Juntas Locales, entre otros agentes implicados” y es que el texto ha sido sometido a una intensa ronda de contactos desde que se comenzara a trabajar en él, el pasado mes de mayo, de cara a recoger sugerencias y aportaciones que lo complementen como labor previa a la redacción del que fuera hasta ahora el anteproyecto.
El regidor ejidense ha recordado que “el objetivo, por tanto, ha sido el de convertir esta ordenanza, que es pionera en Andalucía, en un marco normativo que englobe con gran amplitud de miras y desde todas las vertientes la prevención y erradicación de esta plaga para poder ofrecer así una solución a la problemática que se da en la actualidad”.
Góngora ha incidido, por tanto, en que “este documento supondrá un gran avance en esta materia y es que, gracias a ella, se podrá obligar a las comunidades de propietarios de jardines y piscinas privadas a cumplir con los requerimientos que se establezcan al respecto. Una labor que junto al trabajo del Ayuntamiento con los tratamientos que viene realizando hasta ahora en las zonas públicas supondrá un salto cualitativo importante a la hora de acabar con estos insectos durante los meses de mayor incidencia”.