El Area de Gestión Sanitaria Norte forma a profesionales en ‘Benzostopjuntos’

El Área de Gestión Sanitaria Norte de Almería ha formado, en el Centro de Salud de Huércal-Overa, a un total de veinticinco profesionales de medicina de familia, enfermería de familia, farmacia de Atención Primaria, Comunitaria y del Colegio Oficial de Farmacéuticos para el programa 'Benzostopjuntos'. Una iniciativa de la Consejería de Salud y Familias, que tiene como objetivo mejorar el uso a largo plazo de las benzodiacepinas y disminuir la posible dependencia que genera el consumo continuado de ansiolíticos , cuyo consumo ha crecido un 4% desde 2019.

La campaña pretende mejorar el conocimiento sobre las benzodiacepinas y sus alternativas, con el objetivo de minimizar los riesgos derivados del uso continuado de estos fármacos, siendo los más utilizados lorazepam, lormetazepam, alprazolam, bromazepam o zolpidem, entre otros. ‘Benzostopjuntos: Vivir sin tranquilizantes es posible’ se dirige a usuarios que presentan un uso crónico de benzodiacepinas para tratar la ansiedad y/o el insomnio.

En las visitas que estos usuarios realicen a las consultas de atención primaria y a las oficinas de farmacias comunitarias, los profesionales les ofrecerán información y un material educativo con información sobre las benzodiacepinas, las alternativas a su uso (técnicas de relajación, respiración y autocontrol, cambio de hábitos, ejercicios…) y cómo proceder para la deshabituación con la ayuda de los profesionales.

Entre este material se incluye además un auto-test para medir el grado de dependencia a estos fármacos, así como un directorio de las guías de autoayuda para la depresión y los trastornos de ansiedad del Servicio Andaluz de Salud y una sugerencia de pauta de deshabituación.

La campaña se va a extender de forma progresiva en toda Andalucía, y para su fase inicial se ha seleccionado un centro de atención primaria de cada provincia. En Almería, el centro seleccionado ha sido el Centro de Salud de Huércal-Overa. Este proyecto se realiza con el apoyo de sociedades científicas, consejos de colegios profesionales y asociaciones de consumidores, con la implicación directa de profesionales de Atención Primaria (enfermería, medicina de familia, farmacéuticos y trabajadores sociales) y las oficinas de farmacia comunitarias.