La situación del mercado energético actual obliga a los consumidores a buscar soluciones de autoconsumo para no depender de los disparatados precios que las tarifas eléctricas han alcanzado en los últimos años, llegando en 2022 a multiplicarse por seis. Esto, sumado a una mayor concienciación medioambiental con la necesidad imperante de reducir las emisiones de gases de efecto invernadero para combatir el cambio climático, ha impulsado el sector de las energías limpias, como el autoconsumo fotovoltaico y la climatización eficiente y renovable que ofrece la aerotermia. De hecho, son la combinación de ambas la energía que se ha convertido en referente para el presente y necesaria para un mejor futuro debido a sus excelentes beneficios, como podrá verse en este artículo.
Este año 2023 ha sido el primero en la historia en el que, de acuerdo a la Agencia Internacional de la Energía (AIE), la inversión global en energía solar ha superado a las inversiones en petróleo. España no es una excepción y las instalaciones de placas solares para autoconsumo doméstico se han disparado en los últimos meses, una excelente noticia para el medio ambiente y para la economía familiar.
Por otro lado, en relación a los sistemas de climatización eficiente renovable, la aerotermia está de moda en Europa. Tanto es así que en Noruega cerca de un 60% de los hogares ya cuentan con una bomba de calor aerotérmica instalada. En España, aunque se avanza a un ritmo más pausado, se estima que para el año 2030 la aerotermia representará 1 de cada 3 sistemas de climatización instalados.
Placas solares y aerotermia, la combinación perfecta
La combinación de la instalación de placas solares fotovoltaicas y sistemas de aerotermia en los hogares es la solución más eficaz para combatir la subida de los precios de la energía a la vez que se reduce la emisión de gases de efecto invernadero.
Una instalación de placas solares doméstica puede llegar a suministrar desde un 40% hasta un 100% del consumo de electricidad de una vivienda, en dependencia del nivel de radiación solar del lugar de instalación, la dimensión de la misma y si tiene o no un sistema de acumulación de excedentes de producción eléctrica, como pueden ser las baterías físicas de litio o las baterías virtuales.
Por otro lado, la aerotermia es un sistema de climatización sumamente eficaz que consume escasamente un 20% de la energía que consumen los sistemas de climatización tradicionales (calderas de gas o gasóleo). En sus versiones más completas, la aerotermia tiene la capacidad de integrar la producción de agua caliente, calefacción y refrigeración todo en un mismo sistema. Estos aparatos cuentan con la ventaja añadida de no requerir apenas mantenimiento ni utilizar combustibles inflamables o gases contaminantes.
Coste y retorno de la inversión
Aunque el coste de una instalación de aerotermia con placas solares es elevado, hay que considerar, por un lado, que su consumo es muy inferior a los sistemas de climatización tradicionales. Por otro lado, la electricidad que necesitan los sistemas de aerotermia la pueden proveer las placas solares, ya que estas, como se comentaba con anterioridad, suministran entre un 40% y un 100% de la energía de una vivienda. De este modo, se trata de la combinación perfecta para alcanzar la eficiencia e independencia energética total, y una vez alcanzado el punto de retorno de la inversión, el ahorro será del 100 % del consumo energético.
Para conseguir llegar al mencionado punto de retorno de la inversión lo antes posible en una instalación combinada de aerotermia con placas solares, hay que tener en cuenta que el sistema de aerotermia elegido deberá tener la capacidad de utilizar los excedentes energéticos para producir agua caliente o fría y acumularla para usarla cuando se requiera. En este sentido, si se tiene esto en cuenta, el retorno de la inversión se sitúa entre los 3 y los 8 años, y eso sin contar con las subvenciones públicas disponibles.
Subvenciones
Las instalaciones de placas solares para autoconsumo doméstico y las instalaciones de aerotermia disponen a día de hoy con más que interesantes subvenciones públicas con las que sería posible llegar a cubrir más de un 40% del coste de las instalaciones. Aunque en estos momentos esas subvenciones están vigentes hasta el 31 de diciembre de 2023, es probable que vuelvan a salir nuevas partidas pronto, ya que las instalaciones de aerotermia y placas solares son el futuro y el presente de la energía.
Afortunadamente, el Gobierno actual está apostando de forma decidida por este tipo de infraestructuras. Estrategias que pretenden alejar al país de su extrema dependencia de las fuentes de energía tradicionales, altamente contaminantes, no renovables y tremendamente costosas, como son el petróleo o el carbón.