Gripe y Covid: Mascarillas y vacuna

Hay preocupación en Almería por el aumento de casos de COVID-19 y gripe tras la Navidad. Actualmente, la tasa de incidencia de infecciones respiratorias agudas en Andalucía es de 505 casos por cada 100,000 habitantes, según información proporcionada por la Junta de Andalucía.

Mascarillas: Lo peor de la gripe está por llegar

A pesar de los esfuerzos realizados durante las festividades para controlar la propagación de estas enfermedades, las autoridades advierten que lo peor aún está por llegar. Juan de la Cruz, delegado de Salud de la Junta de Andalucía en Almería, destacó que "estamos lejos de alcanzar el pico", señalando que la incidencia aumenta con las bajas temperaturas.

Comparativamente, la provincia de Almería presenta una tasa de incidencia de 435 casos por cada 100,000 habitantes a fecha del 31 de diciembre, en contraste con los 501 casos de gripe en toda Andalucía. A nivel nacional, se registraron cerca de 1,000 casos por cada 100,000 habitantes en la misma fecha.

Ante este escenario, la Junta de Andalucía hace un llamamiento a la ciudadanía para que extreme precauciones. Se aconseja el uso continuo de mascarillas y un énfasis en la higiene de manos, especialmente para aquellos que ya están experimentando síntomas gripales.

En respuesta a la situación, la Administración autonómica ha anunciado el refuerzo de la campaña de vacunación. Juan de la Cruz detalló que la vacunación sin cita continuará todos los jueves en diferentes puntos de Almería. Además, insta a las personas indicadas para la vacunación a pedir cita en el centro de salud. Aunque se ha logrado un aumento en el índice de vacunación en personas mayores de 60 años, llegando al 60%, se busca alcanzar el 70-75%.

En conclusión, se hace un aviso urgente a los grupos de riesgo, incluyendo a personas mayores de 60 años, aquellos con patologías crónicas, embarazadas, niños de 6 a 59 meses y personal sanitario, a no dudar en vacunarse contra la gripe y el COVID-19. La responsabilidad individual se vuelve crucial en la lucha contra estas enfermedades respiratorias, y las autoridades instan a la población a seguir las recomendaciones para evitar una mayor propagación.

RECOMENDACIONES

Juan de la Cruz, el delegado de Salud en Almería, destaca la importancia del sentido común y la responsabilidad individual en la prevención del COVID-19 y la gripe, independientemente de las decisiones que tomen el Gobierno Central y las comunidades autónomas respecto a la obligatoriedad de las mascarillas en centros sociosanitarios.

El delegado subraya que, aunque la Junta de Andalucía determinará la obligatoriedad o no de las mascarillas en dichos centros, la recomendación de su uso persiste desde el mes de julio. Enfatiza que el sentido común debe primar, especialmente para aquellos que presentan síntomas de gripe o COVID-19, o simplemente desean evitar contraer estas enfermedades.

"Yo he visto muchas veces que en muchos sitios de la zona sensible, los médicos y los pacientes siguen utilizando las mascarillas, sobre todo para protegerse a ellos y a las personas sensibles que están a su alrededor", menciona Juan de la Cruz. Destaca la importancia de la medida en centros especializados como los de neumología, donde los pacientes son susceptibles a infecciones debido a condiciones respiratorias, como el asma.

Asimismo, señala la necesidad de mantener la precaución en la zona de pediatría, donde los niños pueden desarrollar enfermedades de forma brusca. En este sentido, se recomienda la vacunación para los niños, especialmente en centros con tratamientos oncológicos, donde la vulnerabilidad es aún mayor.

A pesar de la incertidumbre sobre la obligatoriedad de las mascarillas, Juan de la Cruz hace un llamamiento a seguir utilizando este elemento de protección como medida adicional para salvaguardar la salud individual y colectiva.

En conclusión, la recomendación de utilizar mascarillas persiste como una herramienta efectiva en la prevención de enfermedades respiratorias en Almería. La responsabilidad personal y el sentido común se erigen como pilares fundamentales en la lucha contra el COVID-19 y la gripe, destacando la importancia de proteger a los más vulnerables en los entornos de salud.