Con el mercurio alcanzando cifras más propias de la primavera que del invierno, los residentes de la provincia de Almería se están ajustando a un clima inusual para esta época del año. El 26 de enero ha traído consigo temperaturas que rompen récords, superando los 30 grados en puntos como Lucainena de las Torres y Albox.
La playa del Zapillo se ha convertido en el epicentro de la actividad, con personas disfrutando de la calidez del sol y tomando baños en el mar para combatir el calor. La falta de viento contribuye a una sensación térmica más intensa, obligando a los residentes a buscar maneras creativas de mantenerse frescos.
Aunque la mayoría celebra esta pausa invernal, como si hubiese habido invierno, hay quienes expresan su preocupación ante la evidente señal del cambio climático. Algunos se preguntan cómo serán las temperaturas cuando llegue el verano, mientras otros simplemente se sumergen en la corriente de calor inusual, aceptando que el cambio climático ha llegado para quedarse.