La Consejería de Agricultura, Agua y Desarrollo Rural de la Junta de Andalucía ha anunciado hoy la declaración de alerta amarilla debido a la preocupante escasez de agua en varios municipios de las comarcas del Levante y la Almanzora, en la provincia de Almería. Ante esta situación, se ha establecido un límite de consumo de 200 litros por persona y día como medida de urgencia para gestionar los recursos hídricos disponibles.
La consejera Carmen Crespo ha presentado en Carboneras un plan de contingencia para abordar la crisis, que contempla la posibilidad de recibir agua mediante transporte marítimo en caso de que la sequía se intensifique. Las obras necesarias para implementar este sistema podrían extenderse hasta cinco meses y se llevarán a cabo en el muelle público del puerto de Carboneras, una concesión administrativa a cargo de Puertos del Estado. Los otros muelles están concesionados a Endesa y Holcim.
Según ha explicado Crespo, el proyecto implica la instalación de una conducción de aproximadamente 700 metros para transportar el agua desde una desaladora ubicada en Escombreras, Murcia, hasta una balsa con capacidad para almacenar hasta 5.000 metros cúbicos por hora. Esta infraestructura permitirá distribuir el recurso hídrico por toda la provincia de Almería, mitigando así los efectos de la sequía.
Los trabajos están programados para comenzar próximamente, una vez que se llegue a un acuerdo entre las diferentes administraciones implicadas. La consejera ha destacado la importancia de esta iniciativa como una solución crucial para afrontar la grave sequía que afecta a Andalucía, agradeciendo la colaboración y sensibilidad mostrada por el presidente y la consejera de la comunidad autónoma de Murcia desde el inicio de las conversaciones para garantizar el suministro de agua.
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