Almería se queda sin servicio ferroviario hasta el año 2026 debido a las obras del soterramiento, que supondrán una mejora en la conexión y la seguridad de la ciudad. El último tren que llegó a la estación intermodal fue el lunes por la noche, procedente de Granada. Desde entonces, los viajeros tendrán que usar autobuses lanzadera hasta la estación provisional de Huércal de Almería-Viator, donde podrán tomar el tren hacia otros destinos.
Esta situación se mantendrá durante 32 meses, el tiempo estimado para las obras de soterramiento que permitirán la llegada del AVE a la capital.
Las obras del soterramiento, que comenzaron hace unos meses con el derribo de la pasarela de la estación y del puente de Los Molinos, avanzan según el plan previsto y suponen un hito histórico para Almería, que llevaba décadas reclamando esta infraestructura. El objetivo es eliminar el paso a nivel que divide la ciudad y crear un corredor verde que una el centro con el puerto.
El subdelegado del Gobierno, José María Martín, ha pedido comprensión a los viajeros por las molestias que se van a ocasionar durante estos meses, y ha asegurado que el resultado final merecerá la pena. Martín ha explicado que los horarios de los autobuses lanzadera se han adaptado a los de los trenes, y que los viajeros podrán comprar sus billetes en la estación intermodal o en la web de Renfe.
Por su parte, el portavoz de la Mesa del Ferrocarril, José Carlos Tejada, ha reclamado que las instalaciones provisionales de Huércal de Almería cuenten con todas las comodidades necesarias para los viajeros, especialmente en los meses de verano. Tejada también ha insistido en la necesidad de recuperar el segundo Intercity con Madrid, que solo funciona por la mañana, y de avanzar en el proyecto de la alta velocidad, que permitirá conectar Almería con el resto de España en menos tiempo.