En un reciente estudio llevado a cabo por el Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC) y colaboradores internacionales, se ha descubierto que los árboles en los bosques tropicales muestran una notable resistencia a la sequía, pero son adversamente afectados por el exceso de lluvias. La Estación Experimental de Zonas Áridas en Almería ha compartido estos hallazgos el jueves, arrojando luz sobre cómo el cambio climático está afectando estos ecosistemas vitales.
El equipo de investigación, liderado por Michael J.O’Brien, utilizó más de diez años de datos para analizar el crecimiento y la supervivencia de los árboles en relación con las variaciones climáticas en una selva tropical de Malasia. El estudio se centró en el Valle de Danum en Sabah, Borneo, donde se plantaron 80 parcelas con 25 especies diferentes de árboles y se monitorearon durante 13 años.
Los resultados indican que, aunque los árboles han demostrado ser en su mayoría resistentes a períodos de sequía y déficit de lluvia, las inundaciones y las precipitaciones excesivas han tenido un impacto negativo significativo. “Casi todas las especies mostraron una disminución en la supervivencia durante los períodos de alta precipitación”, señaló O’Brien.
Con un promedio anual de 3.000 mm de lluvia, la región de estudio está experimentando un aumento en las precipitaciones anuales y sequías supra-anuales, fenómenos que se intensifican debido al cambio climático. Este estudio subraya la importancia de comprender los efectos del cambio climático en los bosques tropicales, que son esenciales para la biodiversidad global y el equilibrio ecológico.