La planta fotovoltaica del Sindicato de Riegos de Cuevas del Almanzora ha comenzado a operar, reduciendo el costo del suministro de agua para 800 hectáreas de cultivo. Utiliza las horas de luz del día para bombear agua a la balsa de Ballabona, incrementando así los recursos disponibles para riego y disminuyendo los costos energéticos.
El Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación (MAPA), mediante la Sociedad Mercantil Estatal de Infraestructuras Agrarias (SEIASA), ha completado las obras para equipar la zona regable del Sindicato de Riegos de Cuevas del Almanzora (Almería) con una planta solar fotovoltaica. Esta planta permitirá disminuir los costes energéticos asociados al bombeo de agua de riego hacia la balsa de Ballabona, que provee a 800 hectáreas de cultivo.
Con un presupuesto de 802.977,29 euros (sin IVA), el proyecto ha consistido en la instalación de una planta solar fotovoltaica flotante sobre la balsa de Abellán para autoconsumo. Esto posibilita que los agricultores utilicen las horas de sol para operar el bombeo, incrementando así el volumen de agua almacenada y la eficiencia de la red hidráulica.
La instalación favorece a 150 agricultores que gestionan 800 hectáreas en el municipio de Almería, quienes experimentarán una reducción en los costes energéticos de sus explotaciones agrícolas. El sistema de bombeo y la nueva planta fotovoltaica están supervisados por tecnologías de la información que facilitan una gestión integral.
Durante una visita técnica, el delegado del Gobierno en Andalucía, Pedro Fernández, junto con el presidente de SEIASA, Francisco Rodríguez Mulero, el alcalde de Cuevas del Almanzora, Antonio Fernández Liria, y el presidente del Sindicato de Riegos, Gonzalo Rojas Toledo, inspeccionaron las nuevas infraestructuras para verificar su operatividad.
Este proyecto forma parte del Plan para la mejora y eficiencia de la sostenibilidad en regadíos incluido en la Fase I del Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia y está financiado por los fondos Next Generation de la Unión Europea. La naturaleza público-privada de la financiación implica que la contribución pública no excederá el 80% del coste de los gastos elegibles, siendo el resto financiado por las comunidades de regantes y usuarios beneficiarios.