La Junta de Andalucía, a través de la Consejería de Sostenibilidad, Medio Ambiente y Economía Azul, ha implementado por cuarto año consecutivo la señalización mediante balizamiento de la franja marina protegida del Parque Natural Cabo de Gata-Níjar. Esta medida tiene como objetivo conservar los hábitats litorales protegidos y ordenar las actividades de uso público en el espacio natural.
Un total de 103 boyas han sido instaladas en 12 zonas litorales del parque natural, que en verano acoge una elevada afluencia de visitantes. La medida prohíbe la navegación y el uso de embarcaciones movidas a vela o motor en las zonas de baño balizadas, con el fin de evitar situaciones de riesgo para la seguridad y el bienestar de los usuarios de las playas.
El director conservador del Parque Natural, Salvador Parra, recordó que en 2021 se emitió un informe que evaluaba la afección ambiental ocasionada por la afluencia de actividad náutica recreativa dentro de la franja litoral protegida. A partir de ese diagnóstico, se propuso la restricción temporal de acceso a embarcaciones a motor o vela, medida que fue debatida y aprobada en la Comisión de Socioeconomía y Turismo y la Junta Rectora del Parque Natural.
Las boyas se han instaladas en playas y calas como Corralete, Medialuna-Barronal-Mónsul, Reserva Marina Morrón de los Genoveses, playa de Genoveses, Playazo de Rodalquilar, Cala San Pedro, Cala El Plomo, Cala de Enmedio, playa de los Muertos, afloramientos rocosos de Isleta del Moro y Reserva Marina Arrecife de las Sirenas.
Parra recordó que, además de no navegar ni fondear dentro de las zonas balizadas, tampoco se puede fondear sobre fondos rocosos o con praderas de Posidonia ni en zonas de reserva marina, que deben ser atravesadas a un máximo de 10 nudos de velocidad.
La medida tiene como objetivo favorecer que el uso público se desarrolle de forma más homogénea a lo largo del territorio y de las distintas estaciones del año, y responde a la normativa general sobre espacios naturales protegidos y las normas específicas de Cabo de Gata-Níjar, así como a la Ley de Navegación Marítima y la Ley y el Reglamento de Costas.