El Tribunal Superior de Justicia de Andalucía (TSJA) ha paralizado cautelarmente parte de las obras de la estación depuradora de aguas residuales (EDAR) de Oria (Almería) por el posible daño al patrimonio arqueológico que data del siglo XVI y al dominio público hidráulico de la zona. La medida ha sido adoptada a petición de Ecologistas en Acción, que denunció que el trazado de un colector podría afectar a infraestructuras hidráulicas que datan del siglo XVI, como la mina de agua que abastece a la balsa de Janá.
La mina y el espacio de regadío de Janá son de origen medieval andalusí y constituyen restos arqueológicos que no se notificó a la Consejería competente, según el Régimen de Hallazgos Arqueológicos Casuales de la Ley 14/2007. El colectivo conservacionista ha indicado que la mina y el espacio de regadío de Janá son de gran importancia y que el proyecto de obras no tiene en cuenta la importancia de estos elementos y el daño irreversible al patrimonio y a la comunidad de regantes que conllevaría.
El TSJA ha manifestado que "pesa sobre la parte solicitante de la medida cautelar la prueba acerca de la acreditación de los perjuicios sobre los que fundamenta la suspensión de la ejecutividad del acuerdo impugnado". La medida paraliza las obras de colectores y la EDAR, pero no afecta a la totalidad del proyecto.
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