En un hecho que ha generado gran interés en la provincia, se ha celebrado esta mañana en la Ciudad de la Justicia de Almería el juicio por el despido de Encarna Aznar, la única mujer conductora de autobús de la empresa Alsa en toda la provincia. Este caso ha puesto de manifiesto cuestiones relacionadas con la discriminación laboral por razón de género, ya que Encarna denuncia haber sido despedida injustamente.
El juzgado de lo social número 8 de Almería ha dictado un acuerdo que reconoce el despido como improcedente, lo que implica que Encarna Aznar recibirá una indemnización de 45.000 euros. Esta decisión es un hito importante no solo para ella, sino también para todas las mujeres que trabajan en sectores tradicionalmente masculinos y que enfrentan dificultades similares.
Encarna fue despedida tras ser acusada de realizar dos paradas no autorizadas: una debido a una sonolencia sobrevenida y otra relacionada con su condición médica, endometriosis. Durante el proceso judicial, Encarna expresó su esperanza por obtener justicia: "Yo espero que sea favorable, espero que salga todo bien, espero que se haga justicia". Estas palabras reflejan no solo su deseo personal, sino también una lucha más amplia por los derechos laborales y la igualdad en el ámbito profesional.
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