Que el ciclismo español está bajo mínimos, y que no es lo que fue, es una verdad que no admite discusión. ¿Se acuerdan de cuántas escuadras había hace unas décadas? Muchísimas, y nombraré algunas: Reynolds (luego Banesto y posteriormente Caisse d'Epargne), Kelme, Zor (luego BH), Clas, ONCE, Teka, Seur, Huesitos, Orbea... ¿Y grandes ciclistas? También citaré unos cuantos: Perico Delgado, el extraterrestre Miguel Indurain, Alberto Contador, Óscar Freire, Purito Rodríguez, Eduardo Chozas, Juan Fernández, Marino Lejarreta, Carlitos Sastre, Óscar Pereiro, Abraham Olano, Álvaro Pino, Julián Gorospe, Peio Ruiz Cabestany, Ángel Arroyo... ¿Y ahora? Quiero concluir recordando a los que la vida se los llevó y que fueron muy grandes: Luis Ocaña, José María “El Chava” Jiménez, Federico Martín Bahamontes, José Manuel Fuente “El Tarangu”, Miguel Poblet, Antonio Martín, Alberto Fernández... Y es que como buen aficionado al ciclismo español (en los meses de verano me hacía mis kilómetros y subía “cuestecitas”), me duele en el alma ver lo mal que hoy día se encuentra el ciclismo español.