El Tribunal Superior de Justicia de Andalucía (TSJA) ha ratificado la pena de 21 años de prisión impuesta a tres hombres que, en mayo de 2022, violaron a una mujer que habían conocido horas antes en la playa de San Juan de los Terreros, en Pulpí, Almería. Esta decisión se produce tras el rechazo a los recursos de apelación presentados por los acusados, quienes intentaban revertir el fallo dictado por la Sección Tercera de la Audiencia Provincial de Almería.
La sentencia original había establecido que cada uno de los acusados debía cumplir una condena de nueve años por un delito de agresión sexual agravada y otros doce años por dos delitos adicionales de agresión sexual, dado su rol como cooperadores necesarios en el ataque. El tribunal destacó la "abundante prueba de cargo" presentada durante el juicio, que incluyó análisis genéticos coincidentes con los perfiles de los acusados y testimonios considerados "verosímiles" y "creíbles" por parte de la víctima.
Los hechos ocurrieron el 21 de mayo del año pasado cuando la mujer se acercó a un grupo compuesto por los tres hombres y una cuarta persona en la playa. Tras entablar una conversación amistosa, decidieron ir juntos a un mesón cercano para tomar unas cervezas y luego se dirigieron a un supermercado para comprar más bebida. Fue entonces cuando los acusados propusieron trasladarse a un lugar apartado para consumir las cervezas, lo que llevó a la víctima a aceptar.
Una vez en un sitio aislado cerca de la playa, los tres hombres actuaron coordinadamente y "con ánimo libidinoso", abordaron a la mujer. La inmovilizaron tirándola al suelo y sujetándola fuertemente mientras uno vigilaba. En ese momento, procedieron a agredirla sexualmente uno tras otro, amenazándola con "cortarle el cuello". Las lesiones físicas sufridas por la víctima fueron evidentes; presentaba hematomas en brazos y muslos, así como síntomas relacionados con un trastorno de estrés agudo.
El tribunal consideró acertada la calificación inicial del Ministerio Fiscal, que solicitaba 34 años para cada acusado debido a la gravedad del caso. La Sala subrayó que se trataba de una "violación realizada en grupo", donde cada uno desempeñó un papel crucial para facilitar el ataque.
Un aspecto destacado en el fallo fue el testimonio consistente y detallado proporcionado por la víctima durante sus tres declaraciones sobre lo sucedido. A pesar del trauma vivido en un breve lapso, pudo identificar claramente al hombre que inicialmente la empujó y describió cómo los otros dos le sujetaron mientras era desvestida antes del asalto sexual. Este relato fue corroborado tanto por agentes de la Policía Local como por una persona que encontró a la mujer inmediatamente después del incidente.
Además, se presentó un parte médico esa misma noche que documentó las lesiones sufridas por ella. Los informes forenses y psicológicos también confirmaron que su testimonio era "absolutamente creíble" y reflejaba síntomas típicos derivados de haber sido víctima de una violación.
La sentencia no solo condena a los acusados a cumplir con las penas privativas de libertad mencionadas anteriormente, sino que también les impone pagar conjuntamente una indemnización total de 60.000 euros a la víctima. Asimismo, tendrán prohibido comunicarse o acercarse a ella durante 40 años. Finalmente, deberán someterse a 20 años de libertad vigilada e inhabilitación para realizar actividades o profesiones que impliquen contacto con menores.
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