El Juzgado de lo Penal número 5 de Almería ha dictado sentencia contra seis hombres implicados en el cultivo y preparación de sustancias estupefacientes desde un cortijo ubicado en el barrio almeriense de Venta Gaspar. En el transcurso de la investigación, se descubrió un arsenal significativo de armas que estaban a disposición de los acusados.
Los condenados han aceptado penas que oscilan entre dos años y un año y medio de prisión por delitos relacionados con la tenencia ilícita de armas y contra la salud pública. Esta resolución se produjo tras una modificación del escrito de Fiscalía, que inicialmente solicitaba condenas de hasta seis años, pero que se vio reducida tras la retirada de agravantes y el reconocimiento de los hechos por parte de los implicados.
La juez ha concedido la suspensión de las penas privativas de libertad para los acusados, representados por los abogados Mónica Moya y Leo Marfil, bajo la condición de que no reincidan en delitos durante un periodo que varía entre dos años y medio y tres años.
Las detenciones fueron parte de una operación más amplia instruida por un juzgado en Lliria (Valencia) relacionada con robos violentos en viviendas, donde uno de los acusados también está implicado. Los seis hombres residían en el cortijo donde cultivaban cannabis, además del hallazgo considerable de armamento, accesorios y munición operativa.
Este descubrimiento fue resultado del registro ordenado por el juzgado valenciano durante la instrucción de la operación 'Brigantes', llevada a cabo por la Guardia Civil. La operación tenía como objetivo desarticular a un grupo criminal especializado en robos con violencia e intimidación, utilizando armas y vehículos robados, con antecedentes en Valencia y Málaga.
El registro del cortijo almeriense se realizó el 14 de mayo pasado. Durante esta intervención se encontraron elementos como dos carabinas de aire comprimido, un rifle calibre 22, una pistola detonadora con cargador, una pistola semiautomática también con cargador y 315 cartuchos variados. Además, se hallaron más de 3,4 kilos de cannabis con diferentes grados de THC y cinco lotes adicionales de resina que sumaban otros dos kilos. Según las estimaciones presentadas por la acusación, el valor total del material aprehendido podría alcanzar aproximadamente los 35.681 euros en el mercado clandestino.