La Plataforma de Afectados por el Puerto de Carboneras, en la provincia de Almería, ha convocado una manifestación este jueves para expresar su rotundo rechazo al proyecto impulsado por la Agencia Pública de Puertos de Andalucía (APPA) y la mercantil Marina de San Andrés. Los afectados consideran que esta iniciativa supone la "expulsión" de parte de la flota pesquera local, lo que ha llevado a los convocantes a solicitar la "paralización" del mismo.
La manifestación comenzará a las 10:00 horas en el puerto pesquero y se dirigirá hacia el Ayuntamiento, donde los organizadores esperan contar con el apoyo de vecinos, amigos y familiares. En su convocatoria, han denunciado que "nos quieren imponer a una empresa privada para que gestione el puerto", lo que reduciría significativamente el número de amarres disponibles para las embarcaciones locales. "Queriendo imponer unos precios abusivos dejando a la mayoría de las embarcaciones de recreo sin amarres", han añadido.
Los miembros de la plataforma también han expresado su preocupación por el futuro de las embarcaciones deportivas, que en su mayoría pertenecen a carboneros. Lamentan que no se haya tenido en cuenta su larga trayectoria utilizando el puerto durante más de 30 años y pagando las cuotas correspondientes. Además, advierten que esta situación podría impedir que sus hijos continúen disfrutando del mar y la pesca.
El grupo busca recabar apoyo municipal para exigir a la Junta un "boceto" o plan alternativo que evite el desplazamiento forzado de los barcos más pequeños, muchos de ellos propiedad de marineros locales. Desde comienzos de febrero, según indican, la entidad adjudicataria del proyecto ha intentado contactar con los propietarios para solicitar permisos para desplazar sus naves, pero estos se han negado en su mayoría.
Los afectados critican los planes para reordenar el puerto, ya que implican contar únicamente con "29 amarres" para barcos de hasta seis metros, mientras actualmente hay "180 barcos de menos de seis metros". También han señalado un incremento desproporcionado en los precios: se prevé un coste anual por amarre que podría ascender a "60.000 euros más IVA", muy por encima de los "10.000 o 12.000 euros inicialmente previstos".
"Es totalmente desproporcional; hemos comparado estos precios con otros puertos y ni siquiera aquellos con gran renombre cobran tanto", han argumentado. Se cuestionan si la APPA es consciente del abuso que representa esta remodelación, que incluye "amarres de 18 metros" cuando en Carboneras no hay ningún barco de tal tamaño.
Los usuarios del puerto, muchos desde su inauguración en 1991, están decididos a no abandonar sus atraques ante unas obras aún pendientes. La situación actual genera incertidumbre sobre el futuro del puerto y el impacto que tendrá en la comunidad pesquera local.
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