Desde el primer momento, el Equipo de Gobierno del Ayuntamiento de Almería ha pensado en el Plan Estratégico Local no como un proyecto más dentro de los que se abordan en la gestión municipal, sino como EL PROYECTO. ¿Y por qué? Porque sentará las bases de la Almería del futuro. La que queremos, la que hoy soñamos y la que podemos hacer realidad si somos capaces de, desde el diálogo y el trabajo conjunto, plantear las líneas, los ejes sobre los que asentar la mejor de las ciudades al servicio de sus ciudadanos: los almerienses.
Precisamente por eso, y porque estamos convencidos de que es posible, hemos echado a andar con ganas, ilusión y con la intención de que sean los propios vecinos los que dibujen esa Almería en la que quieren vivir. Pretendemos hacerlo desde el realismo, no en vano el plan lleva aparejada financiación y también un cronograma, pero sin abandonar cierta dosis de ensoñación.
Una Almería que potencie su agroindustria y haga partícipe al mundo entero de su bioindustria; una Almería que se convierta en referente de empleo y educación; una Almería que haga de su diversidad en elemento de riqueza; una Almería que crezca mirando al mar y a la inmensidad de oportunidades que aporta; una Almería turística y orgullosa de su cultura; una Almería accesible y cercana; una Almería que luche contra el cambio climático, o una Almería que muestre su carácter innovador y sea ejemplo de ciudad inteligente, al servicio de sus ciudadanos y quienes la visiten.
Esta semana, hemos dado un pequeño gran paso con la presentación por parte del alcalde, Ramón Fernández-Pacheco, de los ocho almerienses que han sido elegidos para movilizar esas iniciativas ciudadanas en estas ocho áreas, de modo que se empiece a trabajar de forma constante, firme y sin dar un solo paso atrás. El horizonte: Almería 2030. Así que manos a la obra porque la ciudad del futuro es un proyecto de todos y para todos.