Poco importó la media hora retraso en el inicio. Fue salir al escenario y cientos de móviles encenderse sobre las cabezas para inmortalizar el regreso de Niña Pastori a la ciudad de Almería, en un nuevo concierto de la programación de #AlmeriaEnFeria, organizada por el Área de Cultura, Educación y Tradiciones del Ayuntamiento de Almería. Y tras los móviles, los olés, los aplausos y los gritos jaleando la grandeza de una artista que, a sus apenas cuarenta años, ha despachado ya más de diez discos, con ventas que superan los dos millones de copias y, sobre todo, ha cosechado un cariño por parte de unos seguidores que la veneran.
Saldría a escena con el calor de una banda de sonoridad potente, con el medio tiempo intenso ‘Acaríciame La Cara’, para pasar a la celebrada ‘Amor de San Juan’, uno de sus temas más legendarios. Por supuesto, no el único, porque la velada fue una colección de grandes éxitos de sus más de 20 años de carrera, salpimentados con acierto con alguna de sus más recientes creaciones de ‘Bajo Tus Alas’, producido una vez más por su guitarrista y pareja, Chaboli, que también se llevó una importante dosis de vítores de las cerca de 2.500 personas reunidas en el recinto de conciertos. “No le gritéis tanto que luego ronea y se pone pesado en casa”, bromearía María Rosa García, Niña Pastori para el arte.
‘Puede Ser’, con sus arreglos líricos, y una sentida versión del ‘Cuando Nadie Me Ve’, de Alejandro Sanz, persona fundamental a lo largo de la carrera de la artista de San Fernando, sonaron mucho más nítidas, al igual que el reciente ‘Desde La Azotea’, que preludió una tanda por bulerías más clásicas, terminadas con el ‘Santo Romero’.
Tras una pequeña ausencia, Niña Pastori sacaría su lado más romántico en ‘Quiero Que Me Beses’, antes de reclamar a su manera la autenticidad en el mundo de la música frente a las imposiciones sobre ‘lo que vende’ en ‘Bajo Tus Alas’. El concierto encararía así su tramo final. Con un muy destacado papel de Toñi Nogaredo y Sandra Zarzana en los coros durante toda la noche, que se sucedían uno tras otro en esa concatenación de compás por tangos, el público gozó un popurrí de temas, ‘De Boca en Boca’, ‘Aire de Molino’, ‘Quién Te Va a Querer’ y ‘El Color del Agua’ y donde quizá se echó en falta el ‘Tú Me Camelas’ tan conocido.
La confesional ‘La Habitación’ y la cadenciosa ‘Cuando Te Beso’, dieron paso la prefiesta final, con ‘La Orilla de Mi Pelo’ y ese viaje a La Habana de ‘Yo Tengo Una Cosa’. Con Yuri a la batería, Luis Guerra al piano, Joni Losada al bajo y guitarra, Manuel Urbina a la guitarra acústica y flamenca y Chaboli como director de orquesta a la percusión y guitarra, no se olvidaría de pasar por ‘Cai’. “Que viva Cádiz y que viva Almería, da gusta venir a una tierra donde se nota que se entiende y se sabe escuchar y apreciar las cosas que están hechas con el corazón”, aseguró. Para cerrar, concluiría con ‘Y Para Qué’, con ese mantra que sintetiza la pulsión vital de la música de Niña Pastori, “y para qué vivir sin ilusiones, cantamos a la vida, bailando tus canciones”.
Desde que en 1996 debutara con ‘Entre Dos Puertos’, la artista de San Fernando ha cimentado una carrera repleta de éxitos, en la que ha sido reconocida con cuatro Grammy Latinos, tres como Mejor Álbum de Música Flamenca (‘Esperando Verte’, ‘La Orilla De Mi Pelo’, ‘Ámame Como Soy’) y uno como Mejor Álbum Folclórico (‘Raíz’). Además, es la única artista de flamenco en haber estado nominada a los Grammy como Mejor Álbum Pop Latino por ‘Raíz’.
Hay muchos más reconocimientos que jalonan la carrera de Niña Pastori, siguiendo su estela de éxitos ha sido reconocida con la prestigiosa Medalla de Andalucía y el Premio Honorífico a su Trayectoria Nacional e Internacional en los Premios “Flamenco en la Piel” en SIMOF 2018.