Convivir con una mascota tiene grandes beneficios para la salud física, emocional y psicológica de quién convive con ellos, ya sean mayores o pequeños. Además de poder compartir juegos, paseos, risas, carreras, etc. Los 7 principales beneficios sobre la salud son:
Esto es debido principalmente a que convivir con mascotas desencadena niveles más altos de la hormona reductora del estrés, la oxitocina, al tiempo que disminuye la producción de la hormona inductora del estrés, el cortisol. Y ocuparse de alguien que no es uno mismo, que depende de nosotros y nos necesita, proporciona un estado de ánimo más positivo y saludable.
Los animales poseen un sentido del olfato mucho más desarrollado y preciso que el de los seres humanos, y por ello, pueden detectar pequeños cambios en el cuerpo humano y avisarnos. Los perros y los gatos, por ejemplo, al detectar un problema, alertan a sus dueños cambiando sus comportamientos, lo que lleva a la detección temprana de enfermedades como el cáncer, la diabetes y las convulsiones, entre otras muchas enfermedades.
Convivir un perro o un gato ayuda a reforzar el sistema inmunitario, con lo que, puede disminuir el riesgo de desarrollar enfermedades como el cáncer, las alergias o las enfermedades del corazón, según recientes estudios médicos realizados.
Las personas mayores que conviven con animales, sienten menos soledad y están de mejor humor. Cada vez son más las residencias y centros de mayores que cuentan con la ayuda de los perros en terapias médicas para las personas mayores, que les ayudan a sentirse más útiles y queridos. Proporcionan amor incondicional a sus dueños y a los que conviven con ellos en la misma casa. Los perros ayudan a las personas ciegas a moverse con más seguridad y soltura por el exterior de sus casas, a la vez que les prestan su afecto y su compañía incondicional.
Los cardiólogos más conservadores recomiendan a las personas con la presión arterial alta que quieran mejorar la salud del corazón, que paseen con sus mascotas. Existen muchos estudios que avalan que esta conducta ayuda a reducir la presión arterial alta, y por ende, ayudan a mejorar la salud del corazón. Porque hace que las personas se activen.
Los dueños de perros suelen dar, alrededor de, tres paseos diarios con ellos como mínimo al día, sobre todo si viven en un piso, o casa sin jardín, o si no tienen espacio dónde el perro pueda correr. Y además, algunos, suelen jugar con ellos a tirarles la pelota, el hueso, el palo, etc. Los dueños de los gatos que no los sacan a pasear, también se mantienen activos porque se moverán jugando con el gato en la casa, recogiendo sus juguetes o incluso limpiando el arenero. Se conocerá gente nueva, porque habrá que llevarles al veterinario, comprarles la comida específica para cada mascota, pasearlos, y será inevitable tener contacto con otras personas cuando salgamos a la calle.
La necesidad de cuidar a los animales, asearlos, pasearlos, alimentarlos, vacunarlos y cuidar su salud, hará ser más responsables a sus dueños y a las personas que convivan con ellos. A los niños les enseñará a ser más empáticos, porque desarrollará el respecto y potenciará los sentimientos de cuidado hacia las mascotas. Y se volverán más responsables. A los adultos además las mascotas les implicarán una gran responsabilidad y una atención constante hacia el nuevo miembro de la familia.
Es importante tener en cuenta que un animal de compañía, lo es para toda la vida, y que conlleva una serie de gastos y cuidados, que se deben valorar de forma responsable antes de lanzarse a adoptar o comprar una mascota.