El centenario de la Asamblea de Ronda celebrada en 1918 ha pasado sin que la Junta de Andalucía y el Gobierno socialista de Susana Díaz, hayan hecho ningún acto conmemorativo, a pesar de que en ella se eligieron los símbolos que consagra el Estatuto de Autonomía.
Como en los libros de historia de los colegios andaluces no aparece este hecho, que sí recoge como referente autonómico el Preámbulo del Estatuto, los nombres de sus participantes son en gran medida desconocidos, por lo que Noticias de Almería ha rebuscado entre la documentación relativa a la Asamblea Regionalista de las Provincias Andaluzas para localizar quienes fueron los almerienses que participaron y en qué grado lo hicieron.
El compromiso de Almería con el andalucismo fue tal, que en el listado de los primeros adheridos a la Asamblea según la revista Andalucía que publicaba la convocatoria, el 20% eran de esta provincia, y además de distintos puntos y tareas laborales.
Francisco Gea Perona, ingeniero. Garrucha
José Sirola García, comercio. Almería
Eduardo López Saneta, empleado. Almería
Antonio López Pérez, cartero. Almería
Francisco Martín, industrial. Roquetas de Mar
Juan Domené Cano, empleado. Serón
Manuel Vicente, barbero. Viator
Manuel Martínez, industrial. Almería
José Andrés Burgos, representaciones. Almería
Francisco Párraga García, secretario municipal. Armuña de Almanzora
José Suero Muñoz, comerciante. Almería
Luis García Romero, comercio. Almería
José Brotóns Gil, fabricante. Almería
Como puede observarse, la implicación era de la mediana burguesía provincial, gente comprometida desde la costa hasta la sierra, y desde el levante al Poniente, y sobre todo teniendo en cuenta que se trata de hace un siglo, y que acudir a esta reunión suponía trasladarse varios días hasta Ronda, dejando negocios cerrados y faltando al puesto de trabajo. Aún así, los almerienses tuvieron una fuerte presencia desde el inicio de los primeros pasos autonomistas.
La bandera blanca y verde fue elegida para Andalucía por la Asamblea Andalucista de Ronda de 1918, en los salones del Casino de Artistas, votándose que se confeccionara en tres franjas iguales horizontales, verde, blanca y verde, tal como lo es actualmente. Años más tarde se desveló que esta enseña era la misma que ondeaba en la época más gloriosa de la taifa de Almería, la de Almustassin, según los versos de su visir Abu Asbag, que hablaban de “una verde bandera/que con la aurora blanca/ se ha hecho un cinturón”. Quizá los almerienses que acudieron a la Asamblea de Ronda algo pudieron tener que ver con aquello.
Se adoptan el verde y el blanco “Porque sus colores –dice Blas Infante- eran los más apropiados para representar la empresa de la restauración de un Pueblo, nunca bélico, y siempre creador de culturas originales, directoras de la Humanidad, como lo fue Andalucía.”
“Verde es la vestidura de nuestras sierras y campiñas, prendidas por los broches de las campesinas habitaciones blancas; limoneros en flor son los árboles preferidos por los andaluces y blancas son nuestras villas y antiguas ciudades de blancos caseríos con verdes rejerías orladas de jazmines. Pura y blanca como un niño, es la Andalucía renaciente que en nuestro regazo se calienta.” – Blas Infante.
“La Bandera Andaluza, símbolo de Esperanza y de Paz, que aquí hemos izado esta tarde, no nos traerá ni la paz ni la esperanza ni la libertad si cada uno de nosotros no la lleva ya plenamente izada en su corazón” – Blas Infante (1936)
La bandera de Andalucía adquirió valor institucional al ser refrendado por el Estatuto de Autonomía de 1981: “La Bandera de Andalucía es la tradicional formada por tres franjas horizontales -verde, blanca y verde- de igual anchura, tal como fue aprobada en la Asamblea de Ronda en 1918”
Hay que recordar que en dicha Asamblea, la bandera fue calificada como “bandera nacional de Andalucía”, igual que el resto de los símbolos, siempre de carácter “nacional”, aunque luego el Estatuto evite mencionar este detalle en su referencia a ellos.
La mencionada asamblea de Ronda, para acordar el escudo de Andalucía, se inspiró en el de la ciudad de Cádiz, cabecera de nuestro Pueblo después de Tartessos, en los tiempo primitivos.
“Símbolo también adecuado para la expresada obra de restaurar un País, siempre cultural; figurando un Hércules juvenil, expresión de la fuerza eternamente joven del espíritu, domando o coordinando la fuerza instintiva de los estímulos animales representada por dos leones; e inscribiendo al pie del escudo esta leyenda: “ANDALUCÍA, POR SÍ PARA ESPAÑA Y LA HUMANIDAD”
Esto es : Andalucía quiere volver a ser, por sí, para reanudar la obra creadora de su historia incomparable; pero esta inspiración, hacia la distinción de su propio esfuerzo y responsabilidad; tiene por fin: Dar a España cuanto por sí llegase a crear con la propia energía, esto es, tiene por superiores incentivos, España y la Humanidad, para los cuales ella anhela lograr en hecho propios el devenir creador de su alma privativa; acreditado por una historia particular ininterrumpida de elaboraciones culturales, intensas, originales,directoras”
Sobre el Escudo, cerrándolo en arco de medio punto, figuran también las palabras latinas “DOMINATOR HERCULES FUNDATOR”