El Ayuntamiento de Níjar ha iniciado las obras de adecuación del barrio Alfarero, para el que se cuenta con una subvención de la Diputación que cubre el 25% de los gastos en las tareas pavimentación y que fue solicitada por el ejecutivo de Esperanza Pérez Felices en el año 2016. El retraso en la disposición de los fondos destinados a planes provinciales será compensado gracias a que el equipo de gobierno ha dispuesto, además de sufragar el 75% del valor total de la obra, llevar a cabo una actuación paralela que supondrá la renovación de las redes de abastecimiento y acometidas de las viviendas de la zona.
La alcaldesa de Níjar ha supervisado el inicio de las obras, consciente de la importancia de este enclave en el plan estratégico trazado para la promoción turística de la Villa. “La primera etapa era conseguir entrar en la red de los Pueblos más Bonitos de España, lo que se oficializó en la pasada edición de FITUR, y para ello contamos con la colaboración de las distintas asociaciones de Níjar. Ahora nos toca hacer que ese recorrido, que esas visitas que ya empiezan a llegar con motivo de esta nominación se lleven la mejor imagen posible de la Villa”. En este paquete de medidas están las distintas actuaciones ejecutadas en el entorno de la Glorieta, con la sustitución del pavimento por adoquín antideslizante entre otras obras llevadas a cabo en calles adyacentes. “Se trata de que al mismo tiempo que cumplimos ese objetivo general de mejorar el aspecto de cara a sacar el mayor rendimiento posible a esa promoción turística, exista de manera paralela un beneficio directo y particular para cada vecino, de ahí que estemos aprovechando estas obras para mejorar las redes de abastecimiento y las acometidas a cada una de las viviendas”.
Las tareas de saneamiento son parte del paquete de mejoras que el Ayuntamiento de Níjar negoció el pasado año con la empresa semi pública Emanagua, entre las que estaban las actuaciones en redes que durante los últimos diez años no habían sido tocadas y cuya actualización y el mantenimiento del precio de suministro se puso como condición para llevar a fin la concesión administrativa del servicio de aguas.
En este sentido, el Ayuntamiento de Níjar ha restado importancia al intento interesado de politizar el inicio de estas y otras actuaciones en el municipio. “Entiendo que muchos vecinos crean que hacemos ahora estas obras porque vienen las elecciones, pero en el caso de Las Eras, aunque somos nosotros los que pagamos el 75% del importe de la obra, ese otro 25% que aporta la administración provincial nos convierte en rehenes de su capacidad de gestión de los fondos públicos. Dicho de otra forma, aunque nosotros planteamos esa obra en 2016, si no es hasta 2019 cuando dicen que podemos hacerla no podemos adelantar su ejecución porque entonces sí que perderíamos esa aportación que aunque corta, nos ayuda a poder estirar el prepuesto municipal a más actuaciones en otros lugares. Si a esto añadimos que a causa de la deuda no hemos tenido disponibilidad económica hasta finales de 2018, podemos contrastar que no se trata de oportunismo sino de meras matemáticas: si no hay no se gasta, y cuando hay es cuando puedes invertir, pero para invertir primero tienes que quitar la deuda que te dejaron”, explica la alcaldesa socialista Esperanza Pérez.