Me ha sorprendido el lema elegido por el PP para las elecciones municipales (y autonómicas en algún caso) porque me recordó el comentario que le hice a un dirigente del PP almeriense –uno de los pocos que se ha salvado el 28A- cuando le dije que, en mi opinión debía “centrarse en Almería”… y mira por dónde…
Me respondió que si pensaba que a los almerienses les daba igual la unidad de España y lo que ocurría con Cataluña, y le contesté que no, pero que si el PSOE tenía un candidato que llevaba muchos años fuera y desconocía la realidad almeriense, Ciudadanos presentaba a uno que no aparecía ni por aquí, y Vox… bueno, peor aún… en cambio, ellos podía presumir de tener un candidato a quien nadie le podía negar conocer perfectamente la provincia y tener experiencia de gestión. Pretendía aclararle que su estrategia fallaba en Almería, porque lo sensato era apostar por aquellos elementos que supusieran una ventaja frente al rival.
Es decir, no le hablaba tanto de “centrarse” en cuanto a volver a tener un mensaje de “centro”, como de convertir a Almería en el centro del debate político. Y probablemente ambas cosas van unidas, porque lo de Vox es la ignorancia sublimada por la inconsistencia, un ejemplo palmario de que la cantera de inútiles que creen que pueden vivir de la política es casi infinita.
Ahora que nos adentramos en las elecciones municipales, esa estrategia debería tener más aceptación, y no solo en el PP.
Cada cual donde le toque votar, el planteamiento que debe hacerse es quién va a hacer mejor su trabajo al frente de la Alcaldía. En realidad no es tan complicado, pero los partidos deberían ayudarnos apostando por centrar su mensaje en Almería, o en el municipio en cuestión.
Desconozco qué puede llevar a algunos a votar en unas elecciones generales una candidatura de la que desconocen quién es el número uno por su circunscripción, que ignoran qué méritos puede tener para estar en ese lugar, que no tienen ni idea de su capacidad para defender los asuntos de esta provincia… ni tan siquiera de si conoce cuales son nuestras urgencias, de dónde venimos y a dónde vamos. Ya digo, desconozco qué les mueve, pero ahí cabe creer que les mueve un interés mayor que el provincial, un ámbito superior, unas políticas más generales… vale.
Lo que no puedo entender es quien vota para una alcaldía a personas que no conoce ni para bien ni para mal, a personas que ni son de su pueblo o de su ciudad, que no saben qué competencias tiene cada administración y por tanto hablan con más frivolidad que dos borrachos apontocados en la barra de una taberna, liándolo todo, personas que no tienen nada que aportar y hasta a veces, cuando se rasca un poco, lo que se encuentran son intereses espurios.
Un alcalde tiene que centrarse en su municipio, en su realidad, en sus problemas, tiene que tener una visión de éste, un proyecto.
Menos mal que en las municipales se trata de eso, de centrarse en Almería. A ver si es verdad.