La operación “Actinolita” dirigida por los funcionarios de la Agencia Tributaria y agentes de la Policía Nacional y de la Guardia Civil, en colaboración con las autoridades judiciales y policiales de Marruecos y República Dominicana, lograron desarticular una organización internacional dedicada al tráfico de hachís, y que ha saldado con la detención de 23 personas. Esta intervención ha desmantelado un presunto delito que iba contra la salud pública.
Pero, ¿qué es esta sustancia denominada hachís? ¿Por qué su distribución ha sido tipificada como un delito contra la salud pública?
Santiago Hernández, portavoz de ZONASUPLEMENTOS, afirma que el hachís es una droga que se obtiene de la mezcla de hojas y flores secas del cáñamo índico con sustancias aromáticas y azucaradas.
‘’Es importante que las personas aprendan a diferenciar este tipo de sustancias para no caer en la ignorancia. Recalco, el hachís contiene una mayor concentración de sustancias químicas psicoactivas, es decir, es una droga netamente recreativa. El CBD, por otra parte, que lamentablemente se sigue confundiendo con estos compuestos, tiene una función analgésica’’, manifiesta el experto.
Los efectos nocivos de esta sustancia atentan contra la integridad de la persona, por ello, su distribución ha sido tipificada como un atentado contra la salud pública. ‘’Al tener mayor concentración de sustancias psicoactivas, el consumo de hachís propicia distorsiones de tiempo y espacio. Además, es la droga más común encontrada en la sangre de conductores que fallecen en accidentes’’, recalca Santiago.
No obstante, a los arrestados no solo se les imputa este delito, sino: asociación ilícita, tenencia ilícita de armas, contrabando de dinero en efectivo y blanqueo de capitales. Y es que, se ha intervenido 828.955 euros, diez fardos de resina de hachís y vehículos de alta gama.
La operación se inició a finales del mes de septiembre de 2017, cuando una patrulla de la Guardia Civil en cometidos de seguridad ciudadana detectó en la localidad de Huércal de Almería (Almería) la presencia de dos personas que estaban introduciendo en un vehículo de alta gama varias bolsas de plástico de color negras.
En su interior se encontraron ocultos más de 300.000 euros en billetes de 20 y 50 euros. El conductor y propietario, un ciudadano francés con antecedentes por narcotráfico, no pudo acreditar la legal procedencia de tal cantidad de dinero, así como tampoco su destino, a la par que profirieron “respuestas incoherentes y contradictorias”.
A raíz de este hecho y de observar la existencia de pruebas suficientes que hacían sospechar que el hallazgo del efectivo pudiera derivarse del desarrollo de actividades ilícitas, y también eludir su legal origen, procedencia y destino, se activó la operación bajo la dirección titular del Juzgado de Instrucción 1 de Almería y de la Fiscal Especial Antidroga de Almería.
En la investigación conjunta, se relaciona al ciudadano francés identificado con el dinero de la cúpula de una organización, donde en el mes de marzo del mismo año se intervino más de 7.400 kilos de hachís en la frontera entre el Sahara Occidental con Mauritania, con la supuesta intención de traerlos hasta España mediante la vía terrestre y a través de distintas sociedades de importación agrícola.
Como se trataba de una organización internacional se creó un equipo de investigación conjunto para la identificación de sus integrantes. En la indagación y a través de procedimientos policiales, se interceptó una maleta que uno de los principales objetivos llevaba hacia República Dominicana. Por esta razón, un equipo conjunto de investigadores se desplazó al país caribeño.
Además, se evidenció que transportaban ocultos 165.000 euros. El giro de la investigación cambió y se estimó que la vía latinoamericana sería el lugar donde se podrían estar blanqueando los beneficios obtenidos del narcotráfico.
De esta forma, en el mes de abril de 2018, gracias a las investigaciones realizadas, se incautó en Almería un camión que transportaba como carga declarada losas de cerámica y en cuyo interior se intervinieron más de 7.200 kilos de hachís que provenía de Marruecos y 177.000 euros en efectivo.
Además, la Guardia Civil constató que los investigados realizaban los trayectos a Marruecos utilizando a mujeres y menores como recursos para pasar desapercibidos ante cualquier tipo de control policial.