Desde UPA, y a través de su responsable provincial, Francisca Iglesias, han remarcado que las movilizaciones son para la "defensa del modelo Almería", para la defensa de "un modo de vida y de un modo de producir frutas y hortalizas con explotaciones familiares que generan riqueza y la redistribuyen". Ha añadido que "dejar todo en manos del mercado es muy arriesgado", al tiempo que pide una nueva regulación relacioanda con el control de la cadena alimenticia.
"Esto tiene que ser un punto de inflexión para que se nos respete", ha afirmado Iglesias, para quien la situación aboca a la "pérdida casi total de las explotaciones". "No podemos dejar que sea el mercado el que gestione nuestras explotaciones porque se pone en riesgo nuestra forma de vida y ha llegado un momento en el que no podemos más", ha concluido.