El Estadio de los Juegos Mediterráneos estuvo a rebosar con motivo del partido frente al Alcorcón y lo mucho que había en juego. De hecho fueron casi 15.000 los aficionados que se dieron cita en las gradas; en concreto 14.759 que crearon un gran ambiente para apoyar al equipo en su lucha por el ascenso.
Sin embargo el objetivo no se puedo alcanzar en casa aunque a falta de una jornada para el final del campeonato el conjunto rojiblanco sigue dependiendo de sí mismo. La afición sigue creyendo en su equipo y a pesar de la decepción se lo demostraron despidiendo a los jugadores con mensajes y gritos de ánimos.