El alcalde de Dalías, el socialista Francisco Giménez, se ha aferrado al cargo a pesar de haber registrado su dimisión voluntaria la noche antes del pleno que se celebró este viernes.
Tal como adelantó Noticias de Almería, Giménez había presentado por escrito y de modo telemático su renuncia no solo a seguir siendo alcalde, también dejaría el Consistorio, pero ésta solo es válida una vez que de ella se ha dado cuenta al pleno, y por tanto, se esperaba que lo hiciese esa misma noche, pero no fue así.
Según explica Francisco Lirola, portavoz del grupo popular, la sesión transcurrió con "normalidad" y en ningún momento el alcalde ni el secretario hicieron alusión al escrito, por lo que cuando llegó el final, él mismo preguntó por el documento de renuncia, a lo que el funcionario contestó que había 10 días para hacerlo efectivo, por lo que se convocaría un pleno para ese fin el día 20. De aquí a esa fecha el alcalde cabría la posibilidad de dejarlo sin efecto.
Lirola critica la "parálisis" que vive el municipio, y que se alarga con esta "dimisión en diferido", puesto si el pleno se realiza el día anunciado, luego habrá que pedir a la Junta Electoral que cerifique quienes son los nuevos ediles, se convoque otra sesión para que tomen posesión, y también habrá que elegir nuevo alcalde. "Podemos meternos más allá de mitad de julio" asegura Lirola preocupado.
La dimisión del alcalde viene precedida de una intensa crisis, ya que precisamente en ese pleno se daba cuenta de la dimisión del Salvador Páez, su número dos, y con anterioridad, otra edil se pasó al grupo de no adscritos. Es decir, si las previsiones se cumplen, a partir del día 20 el grupo socialistas que tenía tres ediles, tendrá dos y además no serán los que comenzaron.
En el transcurso del pleno se aprobó a propuesta del PP, que los plenos sean mensuales, y que se disuelva la Junta de Gobierno para que sea el alcalde en persona quien gestione mediante decreto como forma de darle agilidad a la acción municipal.
También se aprobó reclamar al Gobierno central la apertura del Cuartel de la Guardia Civil, y la realización de una auditoría de gestión del servicio de recogida de basuras, ambas a iniciativa del PP.