Los rojiblancos igualaron dos veces la ventaja del Valencia y buscaron con valentía el triunfo en un partido intenso, apasionante y de alternativas
El Almería se vio en un gran escenario como el de Mestalla, donde los rojiblancos se reivindicaron como la semana pasada contra el At. Madrid. Los almerienses compitieron de igual a igual con el Valencia y llegaron a tenerlo contra las cuerdas. Al descanso estaba 0-0 tras fallar un penalti en el minuto 44. En la segunda parte, lograron empatar dos veces la ventaja del rival, pero no se conformaron y fueron valientes buscando los tres puntos en un encuentro intenso y apasionante con alternativas.
Rubi decidió hacer unos cambios limitados en el once con respecto al partido anterior, a pesar de que el equipo había rendido bien contra el Atlético de Madrid. En la rueda de prensa previa al encuentro anunció que también tendría en cuenta las características del Valencia y algunos aspectos de su último partido frente al Cádiz. Finalmente solo hubo dos modificaciones: Mendes sustituyó a Pozo en la defensa y Ramazani reemplazó a Embarba en ataque.
El Almería sufrió en los primeros minutos debido al gran impulso con el que salió el Valencia, que se veía como el ganador. A los cinco minutos, Fernando tuvo que detener una jugada de Kluivert en solitario. Los valencianistas intentaban constantemente, pero el Almería estaba bien preparado para defenderse.
Los locales tenían más posesión, pero los rojiblancos poco a poco fueron ganando terreno. Cuando recuperaban el balón, salían rápidamente al ataque y cuando lo tenían, lo pasaban con criterio sin llegar a crear una amenaza clara. Las oportunidades se sucedían y conforme pasaba el tiempo, el equipo de Rubi se sentía más cómodo en el campo, mostrando una gran actitud.
Cuando el primer periodo se acercaba a su fin, el Almería tuvo la oportunidad de adelantarse en el marcador al tener un penalti por una mano del defensor del Valencia cuando intentaba bloquear el disparo de El Bilal Touré dentro del área. Ramazani lo lanzó pero el balón golpeó el poste. ¡Qué pena!
Al llegar el descanso, el marcador estaba 0-1 a favor del equipo contrario. Sin embargo, dos minutos después de la reanudación, Kluivert logró un gol al ganarle la espalda a Mendes y anotar con un cabezazo en el segundo palo tras un centro desde la derecha. Esto podía haber afectado el ánimo de los rojiblancos, pero no fue así. Mostraron gran determinación durante todo el segundo tiempo, jugando con valentía y arriesgándose. Siete minutos después del 1-0, Chumi empató al rematar de cabeza un saque de esquina lanzado por Robertone.
El partido era intenso, con muchas oportunidades, pero el Almería fue más estable y preciso en ataque que su oponente. En el 58 el VAR corrigió al árbitro tras señalar un penalti a favor del Valencia; en el 60 Baptistao casi marca un gol... Hubo un intercambio sin parar de golpes.
El Almería se arriesgaba al encarar el arco rival, y esto le salió caro en el minuto 64, cuando Gayá aprovechó un desvío de Fernando en un tiro de Kluivert para anotar el 2-1. Sin embargo, pronto llegó el empate. En el 74, Touré presionó la salida del balón del Valencia, logró quedarse con él, recibió un pase de Melero y lo pasó a Portillo que acababa de entrar. El malagueño colocó la pelota junto al poste izquierdo, imposible para el guardameta local.
El Almería, en lugar de conformarse o especular tras el empate por segunda vez, buscó la victoria. En el minuto 75, Rubi introdujo a Luis Suárez y Embarba para sustituir a El Bilal Touré y Baptistao, respectivamente. El entrenador quería un mayor dinamismo y fluidez en ataque para desconcertar al adversario, pero el resultado ya no cambió pese a los intentos de ambos equipos.