Opinión

Políticos profesiones o profesionales políticos

(Foto: malasombra).
Vicente García Egea | Jueves 25 de mayo de 2023

[publicidad:866]

El próximo domingo 28, en nuestra provincia celebramos las elecciones municipales, tenemos que decidir quién va a dirigir nuestros ayuntamientos, me gustaría introducir este reflexión, pues es algo que siempre considero a la hora de ejercer mi derecho al voto.

Se critica a los políticos cuando dejan la carrera de servidores públicos para ir a la empresa privada. La cuestión es, ¿cómo queremos que sean nuestros representantes en realidad?. En definitiva ¿queremos políticos profesionales o profesionales políticos?, ¿qué formación y experiencia le exigimos a nuestros políticos?

[publicidad:866]

En mi etapa política me he encontrado de todo y en todos los partidos. Hay partidos que aportan comparativamente más profesionales que dedican un tiempo a la política, mientras que los partidos tradicionales tanto de izquierda como derecha, aportan mayoritariamente personas que hacen de la política su profesión. También influye la antigüedad del partido, indiscutiblemente los de reciente creación tienen menos políticos profesionales. También influye la dinámica de funcionamiento de los partidos políticos, pero esto lo trataré en un posterior artículo.

Ninguna de las dos opciones tiene que ser negativa “per se”. Hay políticos brillantes que han hecho de la política su profesión y también hay profesionales que basándose en su experiencia profesional, aportan sus conocimientos durante un periodo a la política, normalmente en su sector profesional y por un tiempo limitado.

[publicidad:866]

Pero esta pregunta que nos hacemos, debe complementarse con otra. ¿cómo se debe salir de la política?, ¿Deben renovarse “sine die” sus candidaturas?, ¿ A qué puede optar cuando deja la política, alguien que ha nacido profesionalmente en la política?

A juicio de Max Weber, considerado uno de los fundadores del estudio de la sociología y la administración pública, de finales del XVIII y principios del XIX, la evolución de la política ha implicado una creciente profesionalización de la actividad, que afecta a las principales instituciones de la sociedad moderna, tales como el Estado, los partidos políticos, los parlamentos, poniendo en grave peligro la libertad del individuo. Esta reflexión la considero de una vigencia absoluta.

[publicidad:866]

En mi opinión hay personas que por su formación y experiencia profesional aportan y elevan la política, pueden introducir reformas, modernización y actualización de las políticas a desarrollar, basándose en su conocimiento y experiencia. Por ejemplo altos cargos directivos de la administración general del Estado o de la administración autonómica y por supuesto directivos de empresas privadas de diversos sectores, especialmente aquellos que han tenido una visión global de la empresa, ocupando cargos de gerencia, dirección general, CEO, entre otros.

Y digo esto porque la rigurosidad, seriedad, estilo, conocimientos, pragmatismo, seguridad, capacitación, competencia, son cualidades que pueden ser inherente a la persona, independiente de la actividad que haya realizado, sin duda. Pero las personas que tienen o han tenido un alto grado de responsabilidad en su actividad profesional, no se les supone, no se les intuye, lo han demostrado y esto es esencial, en mi opinión.

[publicidad:866]

Reconozco que no soy muy favorable a que la única actividad importante que se realice en la vida sea la actividad política, que se llegue a la misma sin haber desarrollado una actividad pública o privada que le avale en su competencia. Ni desde luego, que las personas se eternicen en los cargos públicos. Tampoco soy partidario de dar responsabilidad política a personas sin experiencia vital ni profesional. Sin desdeñar la experiencia política por supuesto.

A lo mejor soy muy exigente, pero no lo creo, se trata de elegir a personas, darles poder y capacidad de decisión sobre los asuntos que nos afectan tanto de forma individual como colectiva. Su trascendencia merece un análisis bajo este criterio, más allá del partido al que represente cada uno de los candidatos, y completar el análisis junto con criterios que se valoran a la hora de depositar el voto a favor de una persona, como son la pertenencia a un partido, la empatía hacia un candidato, el interés racional por un proyecto concreto, los beneficios sociales y comunitarios o cualquier otro que se aplica para la toma de decisión, todos muy respetables, sin duda.

[publicidad:866]

“La política debería ser la profesión a tiempo parcial de todo ciudadano”.Dwight D. Eisenhower, presidente de Estados Unidos entre 1953 y 1961.


Noticias relacionadas