El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, y el líder del PP, Alberto Núñez Feijóo, protagonizarán este lunes un debate televisivo que puede ser clave para el resultado de las elecciones generales del próximo 23 de julio. Ambos llegan al encuentro con expectativas y estrategias diferentes: Sánchez busca recortar la distancia que le separa del PP y mantenerse en el poder con el apoyo de sus socios, mientras que Feijóo aspira a lograr una mayoría suficiente para gobernar en solitario o con la abstención de Vox.
Sánchez ha sorprendido en las últimas semanas con una campaña rompedora, basada en entrevistas en medios considerados hostiles y en la defensa de su gestión al frente del Ejecutivo durante la pandemia y el final de ETA. El presidente ha contado con el respaldo de su antecesor, José Luis Rodríguez Zapatero, quien ha salido en su defensa con orgullo y ha cuestionado la idea de derogar el sanchismo que propone el PP. El PSOE confía en que el miedo a la entrada de la ultraderecha en los gobiernos autonómicos y locales movilice al electorado de izquierda y le permita superar los 110 escaños que le dan las encuestas.
Feijóo, por su parte, ha centrado su campaña en presentarse como una alternativa moderada, solvente y capaz de recuperar la confianza y la unidad de los españoles tras la crisis sanitaria, económica y social. El líder del PP ha tratado de minimizar el impacto de los pactos con Vox en algunas comunidades y ayuntamientos, y ha insistido en que su objetivo es alcanzar los 160 escaños que le permitirían gobernar sin depender de Abascal. Sin embargo, las encuestas le sitúan muy lejos de esa cifra y le obligan a negociar con Vox si quiere desalojar a Sánchez de La Moncloa.
El debate de este lunes será una oportunidad para que ambos candidatos contrasten sus propuestas y traten de convencer a los indecisos, que según algunos sondeos podrían superar el 20% del electorado. También será un reto para demostrar su capacidad de liderazgo, su conocimiento de los problemas del país y su visión de futuro. El cara a cara será seguido con atención por millones de españoles que esperan tener más claro a quién votar el 23 de julio.