El Sevilla se impuso con contundencia al Almería por 5-1 en el Sánchez Pizjuán, en un partido que dominó de principio a fin y que dejó sin opciones al cuadro rojiblanco, que solo pudo maquillar el resultado con un penalti de Luis Suárez.
El equipo local salió a por todas desde el inicio y no tardó en abrir el marcador con un cabezazo de En-Nesiry a los cuatro minutos, tras un centro de Suso desde la derecha. El Almería no se recuperó del golpe y vio como el Sevilla ampliaba su ventaja con un golazo de Lukebakio, que se fue de varios rivales y disparó a la escuadra desde fuera del área.
El conjunto visitante intentó reaccionar con algunas llegadas de Koné y Arribas, pero se encontró con una defensa muy sólida y un portero muy seguro. El Sevilla, por su parte, siguió creando peligro con sus rápidas transiciones y sus jugadas combinadas. Así llegó el tercer gol, obra de Suso, que remató a placer un pase de la muerte de Lukebakio.
La segunda parte no cambió el guion del partido y el Sevilla siguió siendo el dueño y señor del encuentro. Nada más reanudarse el juego, el Almería cometió un error garrafal en la salida del balón y lo pagó caro. En-Nesiry robó el esférico y se lo cedió a Lukebakio, que asistió a Salas para que hiciera el cuarto.
El Almería no bajó los brazos y buscó el gol del honor con más orgullo que acierto. Lo consiguió en el minuto 71, gracias a un penalti cometido por Centelles sobre Ramazani, que transformó Luis Suárez con seguridad. Sin embargo, el Sevilla no se conformó y quiso redondear su goleada con un quinto tanto, que llegó en el minuto 85. Salas volvió a ser el protagonista, al rematar de cabeza un córner botado por Suso.
El partido acabó con una clara victoria del Sevilla, que se mantiene en lo más alto de la tabla, y una dura derrota del Almería, que tendrá que olvidar cuanto antes este mal encuentro y pensar en el próximo.